El azúcar es uno de los aditivos principales para muchas de las cuatro comidas del día. Sea en su presentación 'común' o como agregado para la elaboración de alimentos procesados, alcohol y comida chatarra, es un condimento casi infaltable. A sabiendas de esto, la productora holandesa LifeHunters, que ya había experimentado qué sucedía alimentándose solo con hamburguesas de una casa de comidas rápidas, realizó un prueba para dilucidar lo que pasa en el organismo al suprimir el azúcar durante un mes.
El joven holandés Sacha Harland, de 22 años, se sometió a un periodo de prueba en el que tenía prohibidos los alimentos procesados, los azúcares añadidos y el alcohol. El objetivo del análisis fue alertar a los consumidores sobre las consecuencias en nuestro organismo de la presencia de azúcar 'artificial' en muchos productos de supermercado, desde las bebidas hasta las salsas pasando por los lácteos o los embutidos.
El paso inicial fue un chequeo general y controlar el corazón, los pulmones, la presión sanguínea y descartar algún tipo de enfermedad. La semana del debut, Harland llevó adelante una dieta a base de verduras, yogur, frutas, huevos y otros productos frescos, dejando al margen gaseosas, mermeladas y aderezos. La primera señal de suprimir sus alimentos favoritos se evidenció en el malhumor, que afloraba con mayor frecuencia durante anuncios de bebidas azucaradas. Es la reacción del cerebro ante la falta de ese endulzante.
Tras este ligero proceso de desintoxicación de 25 días con una dieta sana, los resultados reflejaron una pérdida de cuatro kilos -bajó de 81 a 77- , una reducción de colesterol del 8% y una presión sanguínea 10 puntos menor. Además, el voluntario notó un incremento de energía corporal y mayor facilidad para despertarse.
"Queríamos saber cómo se siente una persona que renuncia al azúcar, al alcohol y los aditivos durante un mes. Los efectos físicos y psicológicos fueron extraños; después de la prueba, Sacha está mucho más consciente de lo que come. Pero desde que dejó de tomar solo productos frescos y volvió a consumir cosas con azúcar, le cuesta más dormirse y tiene menos energía", explicó Erik Hensel, uno de los responsables de LifeHunters.
Lo recomendado en las Guías Alimentarias para la Población Argentina es limitar el consumo de bebidas azucaradas, alimentos con elevada cantidad de azúcar, y la cantidad de azúcar agregada a infusiones. "Es importante fomentar hábitos alimentarios saludables tales como consumir a diario cinco porciones de frutas y verduras en variedad de tipo y colores, retirar la grasa visible al consumir carnes, aumentar el consumo de pescado y tomar a diario agua segura, entre otros", recomendó la nutricionista Victoria Nastasi.
LEA MÁS: