Probablemente nunca imaginó causar tal impacto cuando decidió emprender su transformación personal. Hace casi cuatro años cuando vivía en China su dieta estaba basada en comida chatarra por falta de tiempo. Cuando la californiana Anna Victoria inició un camino para resetear su cuerpo lo hizo con el objetivo de lidiar con los problemas de sueño y salud que tenía desde hacía un tiempo como consecuencia de la mala alimentación y el sedentarismo. La modelo fit hizo de su propia transformación física un modo de vida.
En las redes encontró un espacio para motivarse a sí misma con imágenes y textos inspiradores que mostraron su progreso. Pronto su cuenta de Instagram se convirtió casi en una consultora en temas de fitness y nutrición. Después de contestar cuidadosamente a cada persona que buscaba ayuda, Anna decidió crear Fit Body Guides, un proyeto fitness que sedujo a miles de entusiastas, en el que compartió con todos sus seguidores sus conocimientos y sus consejos para llevar una vida saludable.
"Es un sueño. Es increíble cómo puedes ayudar a la gente con las redes sociales", comentó en una entrevista. Elaboró una rutina de ejercicios y un plan nutricional, con comidas también en versión vegana. Ambas planteadas para realizarse en el lapso de 12 semanas. Sin embargo, su dieta está diseñada para causar satisfacción propia. Una combinación de alimentos saludables con gustos personales. Una receta que no está especialmente dirigida para los más de un millón de seguidores.
La dieta elegida por la fit girl
Para el desayuno 4 huevos revueltos, acompañados con con verduras, como espárragos, calabacín y tomate. "Aunque en mi plan de nutrición el desayuno varía, a mí me gusta tomar lo mismo todos los días". Para beber: café o té, a pesar de no ser una gran fan.
Antes del primer entrenamiento elige una fuente de proteínas y verduras. El favorito es un wrap de trigo -una especie de taco o burrito- con pavo. Para después del ejercicio, consume una manzana o un batido de proteínas, a los que normalmente se limita a dos diarios, siempre a base de alimentos naturales.
El almuerzo es una ensalada de atún y pesto. Esta forma parte de su guía de nutrición, y la descubrió en un restaurante de Italia. Además, añade zanahorias, tomates y aceitunas. Para la cena suele optar por pollo a la parrilla. ¿Y el postre? Antes de irse a la cama, se toma un yogur griego con piña o arándanos.
En cuanto a las bebidas se limita a un máximo de dos copas de vino por semana. Y si se excede durante el fin de semana, le agrega un vaso de agua entre copa y copa. Durante el día consume una abundante cantidad de agua: bebe alrededor de 4 litros diarios.
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