Llegó uno de los días más importantes de la vida de la hermana menor de la duquesa de Cambridge. Pippa Middleton se casó con el magnate James Matthews en una íntima ceremonia que tuvo lugar en la casa de campo familiar.
El vestido tuvo el sello de diseñador inglés Giles Deacon y ya se transformó en un clásico con guiños de impronta "british".
La hermana menor de la duquesa de Cambridge, Kate Middleton, saltó a la fama el 29 de junio de 2011, día que ofició de dama de honor en la boda real junto al príncipe William. Las cámaras del mundo captaron la belleza de Pippa Middleton enfundada en un clásico diseño off-white de Alexander Mcqueen. Desde ese momento, se convirtió en una celebridad y hasta se la llamó "la novia del año".
Pero luego de deslumbrar en la boda de su hermana, la futura reina de Reino Unido, el turno era de ella frente al altar. Y los ojos se concentraron en el futuro vestido que luciría.
Tal y como se rumoreaba en las últimas semanas, el diseñador elegido fue Giles Deacon. El modisto inglés, uno de los grandes descubrimientos de la pasarela londinense, fue el responsable de crear un precioso vestido a medida y exclusivo valorado en 12.000 euros. Una creación de guipur en forma de flores, de cuello subido y manga corta, con espalda al aire.
Movimiento increíble
En una entrevista con Business of Fashion, Deacon habló días atrás de su reciente creación: "Todo el vestido está hecho a mano, y por eso en realidad no ves una sola costura". "Tiene un movimiento increíble", aseguró y aunque no reveló mucho acerca de sus conversaciones con Pippa en el diseño del vestido, reconoció: "Ella tiene un gran ojo, ella sabía lo que quería". La novia lució un velo largo, también por delante, con detalle de pedrería y sujeto con una tiara, cuyo precio es de 2300 euros. Un look que combinó con un ramo de flores blancas con ligera caída. Las alianzas son de Cartier.
César Juricich, reconocido modisto, analizó en diálogo con Infobae las características principales del look: clásico y verdaderamente principesco, según su criterio. "Es uno de esos vestidos soñados por muchas novias. Con una manga japonesa, un strapless con una parte cubierta en guipur color blanco, con un velo que le cubría la cara y que después durante la ceremonia se lo quita y hace a la vez de cola. Un vestido muy tradicional, clásico, con un único detalle destacable: la gota de la espalda que deja entrever la piel. Un vestido digno de una novia, elegante, distinguido y sin margen de error. Estaba recatada, pura y casta", definió. Sólo le criticó su carácter de extremo tradicionalismo: "Tal vez fue demasiado clásico, rozando lo aburrido. Podría haber tenido algo más que lo destacara como un diseño pensado para ella".
En julio de 2016, Pippa se comprometió con el magnate James Matthews, un multimillonario propietario de más de 100 hoteles de lujo alrededor del mundo, con el sueño de tener su propia boda digna de una princesa.
Hoy, la ceremonia religiosa tuvo lugar en la iglesia de San Marcos Englefield en Berkshire, Reino Unido, construida en el siglo 12, y fue oficiada por el reverendo Nick Wynne-Jones, el sacerdote residente.
La recepción posterior a la ceremonia religiosa tiene lugar en el jardín de la casa de sus padres, Michael y Carole Middleton, en donde concurren unos 150 invitados.
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