¿Estás absolutamente seguro de que podés distinguir entre un whisky de primer nivel que viene en una caja de madera hecha a mano y el más barato del pasillo de un supermercado?
La lengua sintética del desarrollador Uwe Bunz puede, y no deja lugar para la duda. Puede diferenciar entre cada botella de whisky basada en su marca, edad, mezcla e incluso país de origen.
El investigador de la Universidad de Heidelberg, Alemania, dice que no puede identificar una mezcla desconocida desde cero, pero puede decir si la muestra que tiene es la misma que una conocida. "Si compras una caja de whiskies caros puedes probar si son realmente lo que crees que son", afirmó Bunz.
Mientras que Bunz llama a su creación una lengua artificial, es realmente una solución fluorescente. Simplemente se debe mezclar una muestra de whisky si desea identificarla. En ese sentido, funciona igual que el órgano humano.
"Nuestra lengua humana consiste en 6 o 7 diferentes receptores – dulce, salado, agrio, amargo, denso y picante – y somos capaces de identificar los alimentos por las reacciones diferenciales de esos elementos. La combinación de receptores diferenciales le da una impresión general de sabor de lo que se come", precisó.
El desarrollo fue capaz de contar con 33 whiskys diferentes entre sí durante las pruebas de Bunz, ya que emite una reacción única para cada uno. Incluso mejor, es mucho más rápido y más barato de usar que las técnicas actuales empleadas para determinar la autenticidad de las bebidas.
Bunz ahora planea crear una versión para el vino tinto, pero tiene muchas otras aplicaciones potenciales. Según su artículo, también podría ser utilizado para detectar medicamentos falsificados y perfumes en el futuro.
LEA MÁS:
Prueban con éxito el páncreas artificial hecho por científicos argentinos
Cómo afectará la inteligencia artificial a la sociedad