Por la lógica de la primera impresión, más de uno relacionará la inteligencia sexual con las cualidades que definen a los amantes más competentes, como el número de conquistas, el físico, los atributos sexuales o la frecuencia con que mantienen relaciones. Pero no, ambos significados están lejos.
Ser sexualmente inteligentes y acceder a una vida sexual satisfactoria no depende de aspectos como la apariencia física o habilidades de seducción extraordinarias. Nada tiene que ver con los dotes sexuales, sino que se orienta a cómo encarar el sexo en la vida diaria. Puede que este test arroje un resultado no deseado, pero apelando a la absoluta sinceridad, el cuestionario puede ayudar a mejorar lo que haga falta.
LEA MÁS:
El test de entrenamiento cerebral que pocos aprueban
El sencillo test que determina cuál es la edad de tu cerebro