Los tiempos cambiaron y, con ellos, los oficios, los trabajadores, los jefes, las empresas y el compromiso. En un mundo en constante cambio, para empresas y profesionales la adaptabilidad parece ser uno de los factores más valorados. Los jóvenes no sólo marcan tendencia como consumidores de bienes y servicios, sino que además son referentes para comprender el presente y el futuro del mercado laboral porque son ciudadanos, consumidores, colaboradores y emprendedores. Por eso, si bien las empresas apuntan a este público como clientes, también los buscan como fuerza de trabajo.
En este marco, se realizó la segunda edición de Talent Summit, el Congreso de Recursos humanos organizado por Cia de Talentos y Comunidad RH para identificar, en presencia de referentes de las empresas más importantes del país, los desafíos que se plantean de cara al futuro en la inclusión de jóvenes profesionales, sus necesidades y expectativas. Además, se presentaron los resultados de la encuesta "Empresa de los sueños de los jóvenes", elaborada por la consultora Cia de Talentos, empresa que se especializa en la atracción, el reclutamiento, la selección y el desarrollo de jóvenes profesionales.
Esta encuesta es una investigación que se realiza por novena vez en el país y permite observar los cambios en los deseos y las expectativas de los jóvenes, estudiantes y graduados hacia el trabajo y las organizaciones. En esta edición fueron consultados más de 6 mil casos en Argentina (con la colaboración de más de 50 universidades) y casi 100 mil en ocho países de América Latina -entre 17 y 26 años- lo que la convierte en el estudio sobre jóvenes profesionales de mayor alcance a nivel regional.
En Argentina la situación se distingue de la del resto de la región porque en otros países los jóvenes tienden a empezar a trabajar una vez terminada la carrera de grado. En el país, un 33 por ciento de los encuestados estudia y trabaja a la vez, mientras que un 28 por ciento estudia y busca activamente un trabajo.
El interrogante principal de la investigación tiene que ver con las cualidades de una organización que más atraen a los Millennials que ingresan en el terreno laboral, en un contexto marcado por la valoración de experiencias positivas y de un compromiso fuerte pero a corto plazo.
Este contexto deriva de una gran revolución en el mindset de los jóvenes profesionales, que ahora priorizan el desarrollo de una carrera propia y buscan emprender: 4 de cada 10 jóvenes sueña con tener su propio negocio y la mitad de ellos ya lo está planificando. Sin embargo, aunque las organizaciones ya identificaron este cambio de paradigma, y trabajan en pos de innovar y reinventarse, más de la mitad de los encuestados (57 por ciento) no sueña con trabajar en ninguna empresa en particular.
¿Con qué tipo de carrera profesional/personal sueñan los jóvenes en Argentina?
En primer lugar, para los jóvenes del nuevo milenio, hay un reordenamiento de prioridades en la vida profesional y personal. El 52 por ciento de los jóvenes encuestados creen que lo más importante es alcanzar el éxito profesional mientras que 48 por ciento creen que lo más importante es aprovechar la vida, ser feliz y viajar. De hecho, el 65 por ciento de los participantes indicó que si el dinero no fuese una preocupación, harían algo diferente de su vida, desde otros trabajos, dedicarle más tiempo a la vida personal, buscar otros destinos o arrancar un emprendimiento.
"Antes, entre los 70 y 90, el trabajo era el medio para ganar dinero y con ese dinero después uno realizarse en el 'tiempo libre'. Hoy el trabajo es un espacio de realización donde los jóvenes evaluamos cuánto tiempo y energía vital queremos invertir, sopesando cuánto nos permite realizar nuestro propósito de vida. En este sentido, ya superamos la mirada de equilibrio entre vida y trabajo, como si fueran dos mitades excluyentes y como si uno no viviera mientras trabaja, y entendemos el trabajo hoy, como tantos otros ámbitos diversos de la vida, como un contexto más en el que las personas buscamos realizarnos", señaló a Infobae el Gerente General de Cia de Talentos Argentina.
Con este panorama, es comprensible que a la hora de elegir la carrera de sus sueños los jóvenes vean a las empresas como un medio y no como un fin. Tener una vida significativa se convierte en el factor determinante a la hora de tomar decisiones. Disfrutar la vida, desarrollarse y viajar, entonces, son las oportunidades que esperan que las organizaciones les ofrezcan.
Otro de los obstáculos a los que se enfrentan las empresas es mantener la motivación y el compromiso del joven profesional con la organización. En opinión de 40 por ciento de los encuestados, lo que más los motiva es encontrar un trabajo que los ayude a desarrollarse profesionalmente. En este sentido es valorado para un 37 por ciento de encuestados la oportunidad de tener experiencia en puestos de liderazgo. Sin embargo, en este punto las cosas también están cambiando ya que, en 2015, el 86 por ciento aspiraba a un rol de liderazgo. Ahora realizarse de manera personal y profesional no necesariamente se relaciona con alcanzar puestos jerárquicos. La prioridad está puesta en el crecimiento y, en menor medida, en los trabajos desafiantes y colaborativos.
En relación a la decisión de los jóvenes de abandonar un trabajo en pos de un desarrollo personal más allá de los beneficios de una organización, un vocero de la empresa de búsqueda de empleo Zona Jobs dijo a Infobae: "Ante todo debemos asumir que permanecer muchos años en una misma organización no está bien visto, mientras que desarrollarse en diferentes empresas se crece sí. Podemos discutir cuántos años son muchos o pocos, pero la mayoría se desarrolla profesionalmente en diferentes empresas a lo largo de su carrera".
Y agregó: "La cultura de trabajo cambia permanentemente, lo importante es brindar desde la empresa el contexto adecuado para que sus profesionales se desarrollen y puedan hacerlo sin dejar de lado su vida personal, que ambas cosas convivan armónicamente".
En comparación con el ranking de 2015 de las "empresas de los sueños" de los jóvenes, el año pasado un 56 por ciento admitió tener una, pero, en esta edición, ese grupo se redujo al 43 por ciento. El valor más admirado para tomar esta decisión fue la innovación y la creatividad, según 56 por ciento de los jóvenes. Las tres mejores empresas elegidas fueron Google, Unilever y Banco Galicia. A ellas le siguen Arcor, Coca Cola, la Organización de las Naciones Unidas, Disney, YPF, Techint y un emprendimiento propio.
El 69% de los encuestados que sí sueñan con una empresa, la valoran principalmente por las posibilidades de desarrollo profesional, mientras que el 57% por los desafíos constantes: diferentes actividades y nuevos proyectos. Dentro de las experiencias que más desean tener prima la de trabajar en otros países o culturas (63 por ciento), y no sólo en función de que esta sea un trampolín en la carrera profesional, sino más que nada por la experiencia de vida.
En cuanto a la capacidad de transformación de las empresas, Morin señaló: "En general, las empresas perciben la necesidad de adaptarse al cambio. Algunas lo hacen más rápida y radicalmente, con espacios para emprendimiento interno y hasta rotaciones externa y otras más tímidamente revisando sus procesos de atracción, selección y desarrollo para responder múltiples opciones y no a una carrera profesional única".
"También existen empresas que resisten al cambio y esperan que la situación regrese a un modelo anterior: con candidatos con expectativas de ingresar y permanecer en una empresa por el dinero y el reconocimiento social, por ejemplo. No veo mucho futuro en esta mirada", concluyó.
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