El efecto Justin Trudeau, el primer "político viral"

La puerta se abrió en el 2008. La imagen de la revolución fue Barack Obama, pero el verdadero padre de la criatura fue Michael Slaby, el responsable de la campaña electoral del entonces candidato del Partido Demócrata para las elecciones en Estados Unidos. Allí se gestó el primer proyecto a grande escala para promocionar con éxito a un político en internet. Allí surgió la génesis de los llamados "presidentes 2.0". Y hoy, ocho años después, en el país vecino de Canadá, ya se puede hablar del verdadero "político viral", su Primer Ministro, Justin Trudeau.

Tiene 44 años, es joven, atlético, practicó deportes de muy joven, le gusta bailar en público, es un apasionado de aspectos científicos como la física cuántica, es la gran imagen de referencia para los jóvenes de su país, posee un discurso feminista consolidado y… cada vez que abre la boca en público, genera un efecto viral, un efecto contagio en aquellos que lo siguen.

Trudeau se convirtió en el Primer Ministro de su país en noviembre del 2015 y así confirmó la primera dinastía familiar en el máximo cargo político del país norteamericano. Su padre Pierre había ocupado el mismo puesto entre 1968 y 1979 y una segunda gestión entre 1980 y 1984.

Mientras tanto, su abuelo, Charles-Emile Trudeau fue uno de los empresarios más poderosos de Canadá a principios del Siglo XX.
Justin Trudeau pareció cargar en el ADN su carisma, el desparpajo y la extroversión con la que brilló a lo largo de toda su campaña política. Así como su padre rompió todos los tableros en 1977, cuando fue retratado haciendo una pirueta a espaldas de la Reina Isabel, el joven integrante de un núcleo de tres hermanos llegó a realizar peleas de boxeo o incluso hacer un sexie striptease, ambos para eventos de caridad.

Desde que asumió el liderazgo en el partido Liberal canadiense, Trudeau se transformó casi de manera instantánea en una celebridad. Por su parte, internet se encargó de convertirlo en un fenómeno viral, de desparramarlo por todo el mundo. Tanto para sacar a la luz sus excentricidades como para exponer la línea política de un partido basada en la lucha contra el calentamiento global, la legalización de la marihuana, la reforma del sistema criminal-judicial de su país y una redistribución de la riqueza entre la sociedad. Así, El político, que entonces tenía 43 años, desbarrancó a un Partido Conservador que había estado en el poder durante 10 años ininterrumpidos y se preparó para demostrar que tenía las aptitudes necesarias para el cargo y no sólo se trataba de un "youtuber con aspiraciones políticas".

"Cada vez que se prende una cámara alrededor suyo, se genera un clima especial, se sabe que algo va a pasar. Lo que más se ama en internet de Justin Trudeau es que su personaje no conoce los límites, mientras que el político hace lo que tiene que hacer. Demostró que no sólo era el rompecorazones de Canadá ni un guapo que hacía yoga y se mantenía en forma. Se mantuvo sólido al lado de sus ideas", explicó Mike McNeill, periodista del Toronto Star.

Las cifras confirmaron su condición de político trendie en las redes: el video principal de su campaña electoral, en el que Trudeau habla a cámara encima de una escalera mecánica, sumó más de 3 millones de visitas. En tanto, una aparición pública en abril, cuando dio una cátedra sobre computación cuántica en medio de un instituto universitario tecnológico, cosechó nada menos que 1,5 millones de visitas y lo consagró con el rótulo de "Primer Ministro Viral".

Trudeau transformó en oro cada una de sus apariciones públicas. En su momento, su fotografía con dos osos pandas, como parte de un anuncio de un arreglo comercial con China, generó furor en Facebook e Instagram, mientras que recientemente, una imagen suya con el torso desnudo mientras practicaba surf, al mismo tiempo que una pareja se sacaba fotos para su casamiento, también revolucionó las redes sociales.

"Lo que la maquinaria de las redes sociales y el manejo de imagen en internet le permitió a los políticos fue hacerles entender que cuanto más cotidianos y normales se mostrasen, atraerían una cada vez mayor cantidad de seguidores en la red. En los últimos dos años los liberales canadienses captaron el rol de la política en las redes sociales y Trudeau lo entendió como ningún otro político de su país en la historia", analizó Laura Olin, quien condujo la estrategia de redes para la campaña electoral de Obama en 2012.

Según un estudio de una comisión de asociaciones de estudiantes canadienses, en 2015 la figura de Trudeau hizo que el número de votantes de entre 18 y 25 años subiera nada menos que un 12 por ciento respecto a los comicios anteriores.

"Trudeau tiene una tendencia a realizar comentarios genuinos en cada aparición pública, como lo hizo con lo de la computación cuántica. Eso no es esperable de la mayoría de los políticos y les da la oportunidad a los ciudadanos de sentirse atraídos por alguien que apela a reacciones y frases genuinas en un mundo donde se acostumbra a las intervenciones protocolares", detalló Cameron Ahmad, el vocero del gabinete gubernamental canadiense.

Así y todo, lo más atrapante del joven Primer Ministro viral es que sus apariciones públicas estrambóticas y hasta frívolas también encontraron sustento en su gestión de gobierno.

Desde su campaña. el propio Trudeau planteó un mensaje de apoyo al feminismo: "Me da pena que estas palabras mías sean tomadas como algo atípico, cuando tendría que ser lo normal que un Primer Ministro dijera sobre el rol de las mujeres en cualquier sociedad". Así, una vez asumido en el cargo, designó la mitad de cargos de todo su gabinete a mujeres y presentó un proyecto de ley para que exista una equidad económica en los salarios de ambos sexos, desde los más bajos hasta los puestos ejecutivos.

En tanto, fue el primer gobernante canadiense de la historia en desfilar en una marcha nacional por el orgullo gay y, además, bajo su gestión, su país se convirtió en 2016 en la nación de toda América que más refugiados sirios acogió tras la guerra civil del 2011.

Pasaron más de 30 años que un Trudeau se hizo cargo del gobierno de Canadá y la llamada "Trudeaumanía" encontró su versión 2.0. "Si todos los políticos fueran como Trudeau, habría mucha más paz en el mundo", sentenció en 1970 John Lennon respecto al padre Pierre. Hoy, en 2016, los elogios llegan de las otras estrellas de la red, como Miley Cyrus o Emma Watson.