"Fotografiar es volver a vivir" dicen los expertos. Tal vez sea por eso que en cada momento trascendental de la vida, los seres humanos eligan congelar esos instantes. Tal como sucede en los casamientos o los grandes encuentros, la sesión de fotos al recién nacido está a la orden del día.
La práctica nacida en los EEUU es conocida como newborn photography y ya está instalada en Argentina desde hace aproximadamente 5 años. Cada vez más fotógrafos se inclinan por este rubro y cada uno con un estética definida pero con un objetivo común: resaltarla belleza natural de cada recién nacido.
Quién puede olvidar las tiernas producciones fotográficas de la pionera Anne Geddes. Consagrada en los 90, supo imponer tendencia a través de sus retratos infantiles. Creando mundos imaginarios en donde los bebés se convierten en abejas, mariposas, hadas y otro personajes fantásticos.
Muchos fotógrafos siguieron sus pasos recreando escenas temáticas, personajes de cuentos, animales del bosque hasta disfrazando a los bebés como los monstruos de Pokémon.
En este camino de arte, se destaca Chechu Pezzolano, argentina residente en México."Es un manera de congelar en el tiempo ese momento tan efímero y único", detalló a Infobae la especialista.
Pero en su campo y en la actualidad predomina la tendencia de realizar sesiones de fotos minimalistas utilizando fondos de telas o texturas lisas, colores más neutrales en donde el bebé está desnudo sin muchos accesorios.
De esta manera, María Schefer, médica recibida del Hospital Universitario Austral dio un giro de 180 grados para dedicarse a la fotografía newborn o "al mejor trabajo del mundo", según sus palabras a Infobae.
“Mi estilo es orgánico-natural, uso colores pasteles y neutros intentando que el recién nacido siempre sea el protagonista”, agregó María Schefer
Según las expertas los retratos ponen en valor a la figura del bebé, su rostro, manos, colita y rollitos, "todas esas cosas que nos enamoran de un recién nacido", detalló Chechu Pezzolano.
Las sesiones duran aproximadamente 3 horas y el gran secreto es esperar a que el bebé se quede profundamente dormido y luego, ¡manos a la obra!
Los "sonidos blancos"- es decir – aquellos que reproducen ruidos del mar, lluvia o pajaritos son grandes aliados para relajarlos, ya que estos ritmos se asemejan a los que escuchaba dentro de la panza de su madre.
Cuando realizar la sesión
El mejor momento para retratar a los bebés es durante los 6 y 12 días de vida aproximadamente."Esta etapa ideal para poder lograr posiciones parecidas a las que el bebé hacía dentro del vientre de su mamá. Los recién nacidos están felices cuando están hechos una bolita porque es como han estado hasta ese momento", explicó Pezzolano.
Además, duermen aproximadamente 18 horas y todavía no tienen cólicos, reflujos u otro tipo de molestias.
Poses adorables
Como esta prática tiene sus origenes en los EEUU, la posiciones tienen nombres en inglés como Froggy (ranita) bum up (cola para arriba) chin on hands (boca abajo con manos por debajo del mentón). Lo fundamental es cuidar la seguridad del bebé y que estén cómodos para obtener mejores resultados.
Sin embargo, las profesionales tienen sus preferidas. "Las que más me gustan son aquellas que transmiten algo más que un bebe acostado. Los retratos en manos de sus padres me fascinan, porque transmiten esa fragilidad que caracteriza a un recién nacido", puntualizó Schefer.
También funcionan las poses no posadas donde el bebé bosteza, se despereza o hace alguna mueca. Ambas fotógrafas advierten que es importante que el manejo de los recién nacidos sea realizado por un profesional experimentando en el rubro, ya que se trata de una tarea delicada.
Temáticas
La tendencia es captar al bebé de manera natural pero muchas veces se puede recurrir a elementos creativos para adornar como puffs, cajas, baldes al estilo "vintage", además se utilizan accesorios tales como mantitas, gorritos, vinchas y coronitas.
Incluir hermanos, padres y familiares es otra manera de crear un recuerdo perfecto para toda la vida."A partir del 3 mes de embarazo los padres ya reservan su sesión" destacó Maria Schefer.
La conexión que existe entre los hermanos gemelos se refleja en los retratos. Naturalmente se abrazan o se toman de la mano al igual que en el vientre materno.
Otro de los elementos clásicos elegidos por las profesionales para utilizar como escenografía son los canastos, baldes y cajones.
Sillones, cajas o cualquier elemento donde el bebé pueda descansar de manera relajada es el espacio ideal para llevar a cabo la serie de retratos.