¿Cómo pasó? ¿Cuándo, dónde, por qué? Y sobre todo, ¡¿para qué?! Esas son las incógnitas que surgen ante la novedad de la reconciliación de Charlotte Caniggia y Lhoan, que se habría dado luego de la insistencia de ella. Al menos así lo asegura él. "¿Si estamos de novios? Estamos… despacito", dijo Lhoan en el programa Nosotros a la mañana, de Canal 13.
Tras contar que cuando Charlotte fue a buscarlo -luego de la ruptura- en un principio la rechazó porque estaba "molesto", el cantante reveló que ahora empezarían a convivir. "En este momento está en mi casa", informó Lhoan, quien consiguió alquilar un chalet en un country y comprarse "un autito" porque atraviesa un buen momento profesional.
Además, se sinceró al remarcar en qué términos se darán una nueva oportunidad: "Me prometió (cambiar) varias cosas que no me gustaron, como (la falta de) seriedad en la pareja". Meses atrás Lhoan había hablado sobre distintas costumbres de su novia que no le gustaban, como su presunto gusto por el alcohol.
Estamos bien ahora. Nos vamos a mudar juntos y tenemos varios proyectos. ¡Y no nos peleamos, por suerte!
Pero, ¿qué dijo Charlotte? "Estamos bien ahora, rebien. Volvimos. Nos vamos a mudar juntos y tenemos varios proyectos. ¡Y no nos peleamos, por suerte! Estamos felices", dijo en un audio que le mandó al periodista Tomás Dente.
La definición sobre la ausencia de peleas no es menor. Sucede que durante el verano que compartieron en Carlos Paz -se pusieron de novios en la primavera- los dos tuvieron fuertes discusiones que habrían terminado en violencia física, según denunció Alex Caniggia, hermano de Charlotte. Incluso existieron fotos de supuestos moretones en el cuerpo de la joven.
A escasos días de su regreso al país, luego de unas semanas en Marbella, España, la ex Bailando 2016 ya se hizo notar. Primero por una foto suya en un boliche de Tucumán donde se la vio con una cara un tanto… extraña. Y ahora con esta incipiente reconciliación que pocos esperaban.
Pero al fin las preguntas iniciales quedan ahí, con respuestas truncas. Quizás sean demasiadas como para ser develadas en una sola crónica.
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