Diez días sin comer significó tocar fondo. O más que tocar, darse de lleno. Su hija, Malena Mendizábal, le otorgó entonces una especie de ultimátum: algo debía hacer para intentar salir de esa situación -desde hacía tiempo- tan preocupante. Así fue como María Valenzuela decidió internarse en una clínica psiquiátrica para buscar una mejoría. Ingresó pesando apenas 39 kilos. Y desde hace más de un mes, allí se encuentra.
"Ella venía con un adelgazamiento. Ya desde diciembre no estaba bien. Noté que algo venía pasando en ella", reconoció su amiga Noemí Serantes, quien en 2011 sufrió la pérdida de su hermana Liliana, con quien formaba el inolvidable dúo Nu y Eve. "Estaba muy delgada. Eso ya había pasado de la (cuestión) estética, pero no reaccionamos. ¿Si tenía una obsesión con el físico? Siempre la tuvo. De adolescente Mariquita era un poquito piernuda de arriba. No sé si tanta obsesión, pero empezó a cuidarse con el Bailando (por un sueño), donde demostró que podía bailar aunque hubiera pasado los 50 años", declaró la actriz en el programa El diario de Mariana.
Si bien no le quitó importancia a la tristeza que le podría haber generado a Valenzuela la muerte de su mejor amigo, Noemí no encuentra allí la razón exclusiva de su depresión. Por caso, recordó los difíciles episodios que su amiga debió atravesar en los últimos años: el problema de salud de Malena, su divorcio de Juan Carlos Pichuqui Mendizábal ("Perdió un departamento", puntualizó Serantes), la muerte de su mamá. Y sumó otra circunstancia: la falta de trabajo, si bien Valenzuela hizo gira teatral hasta el año pasado.
Para un actor, la desocupación "es una depresión grande", considera Noemi: "No te olvides de Gianni Lunadei; terminó suicidándose". "Es una suma de muchos años. Cuando Pichuqui falleció, APTRA lo olvidó. Y Mariquita lo dijo: le dolió, era el padre de sus hijos, más allá de que sufrió mucho en esa separación", afirmó Serantes. No obstante destacó que María siempre contó con el respaldo de Pablo Codevilla (un "amigo de su infancia"), Adrián Suar y Quique Estevanez, porque "todos sabían que había que ayudar a Mariquita".