María Eugenia Ritó confesó que tuvo una recaída y que tuvo que asistir por propia voluntad a una clínica para que la ayudaran. La vedette había estado internada en el 2014 por su adicción a las drogas.
"Tuve una recaída y tuve mucho miedo, por la inseguridad de que pueda ser mayor recurrí por propia voluntad a la clínica Carpe Diem, donde había hecho el tratamiento", contó en Intrusos y agregó que con esta experiencia se dio cuenta de lo difícil que era hacerse cargo y buscar más ayuda de la terapia, que no le alcanza.
"Fue una decisión de propia voluntad para resguardar mi salud", dijo y cuando Jorge Rial le preguntó si había vuelto a consumir drogas, Ritó no contestó y cambió de tema.
"Uno puede tener una recaída por un millón de cosas, no sé si es por algo en especial. Por las dudas, como tengo miedo, me resguardo y me voy a la clínica donde me siento contenida", dijo y recordó: "Yo dejé de estar bien conmigo y me fui desvinculando de los medios".
Ahora, Ritó deberá esperar a ver qué medidas toma el médico y si decide internarla o realizar un tratamiento ambulatorio: "Lo reconozco, vergüenza no me da, vergüenza es robar, matar, es muy difícil. Estoy muy contenta y segura de la decisión que tomé", cerró.