El fuego de la caldera del tren a vapor al cual se sube una Natalia Oreiro cubierta por un sobretodo, anticipa lo que se verá apenas un instante después en el video. La morocha -de las más bellas a uno y otro lado del Río de la Plata- bailando de manera muy sensual, y con un atuendo ultra provocativo. Sí, como hacía rato no se la veía a la mujer de Ricardo Mollo.
El contexto tiene que ver con la banda sonora de la película Gilda, no me arrepiento de este amor, con la cual Oreiro pudo cumplir su gran anhelo: interpretar a la desparecida cantante. Una de las canciones es Corazón valiente, a la cual el Negro Rada -con sus tumbadoras- le puso candombe, mientras que Natalia le aportó erotismo para un video que ya deja su marca en las redes. ¡Miralo!
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