Amalia Granata no atraviesa su mejor momento aunque, parece ser justos, quizás sí: está esperando su segundo hijo. Lo cierto es que aparecieron audios, fotos y chats de su pareja, el empresario Leonardo Squarzon, que delatan su infidelidad.
"La estamos luchando", dijo dejando en claro que todo puede arreglarse. ¿Qué sucederá con este romance al que todos creían como una hermosa historia de amor? Días atrás, antes del escándalo, realizó una entrevista para la revista Nacer y crecer donde su posición era sumamente optimista.
Allí aseguraba que volvió a creer en el amor, que "todo muy de repente" y explicó cómo se conocieron: "Una amiga me contactó con Leonardo porque me dijo que me quería conocer. Comenzamos a chatear vía WhatsApp, y tras una intensa charla de varias horas, él me invitó a pasar unos días a Miami porque estaba allá y volvía en unos días. ¡Pero no podíamos esperar para vernos! Así que me sacó un pasaje para esa misma noche, no dormí. Hice los arreglos necesarios para dejar a Uma con mi mamá, preparé un bolso y viajé a verlo".
"Nunca me había pasado esto. Desde que empezamos a hablar parecía que nos conocíamos de años. Ni bien nos vimos, nos dimos un abrazo enorme y no nos podíamos soltar. Ahí no hubo beso, pero sentí que éramos uno (…) Fue un flechazo fulminante, vivimos este momento a pleno", continuaba después.
También habló sobre el embarazo, y consideró que "cuando viene una nueva vida en camino siempre es por algo. Lo mismo me pasó con Uma, ella vino a transformarme y a enseñarme muchas cosas". Porque no es el primer bebé que espera, el cual "será un varón y se llamará Roque", ella vive con Uma, su hija de 9 años que tuvo con su ex pareja Cristian "El Ogro" Fabbiani.
Eso no va a cambiar, ya que el vínculo que tejerá con el bebé será único, sin embargo algo cambia con una infidelidad. Pero, antes de saberlo, ¿cómo estaba en ese momento? "En lo emocional, si bien fue un embarazo sorpresivo, estoy feliz -dijo alegre-, lo diferente es que ahora me siento acompañada y contenida desde el comienzo. Tené en cuenta que yo viví el embarazo de Uma sola, era primeriza y fui a la sala de partos sola con mi mamá. Estoy viviendo este embarazo muy diferente y con mucho amor".
Sin dudas, la experiencia con Uma la marcó, y así lo recordó: "Es muy duro porque no tenés relevo. Todo lo pasás sola, lo bueno y lo malo. Y eso que yo puedo tener una niñera mientras que trabajo, auto y otras comodidades. Pero siempre ser mamá soltera es duro. A otras mamás les puedo decir que sigan luchando, que no bajen los brazos".