El estado delicado del joven Brian Fernando Aguinaco, de 14 años, todavía permite rememorar aquellos minutos fatídicos de la tarde del sábado navideño en el barrio de Flores. La lucha por la vida del adolescente después de haber sido baleado por dos motochorros no hace más que reflejar las sensaciones de injusticia, impotencia y desesperación para unos vecinos que se sienten desamparados: sucedió en una plena tarde soleada, a pocas horas de la celebración de la Nochebuena y de la manera más inesperada.
El hecho ocurrió poco después de las 14:30 en el cruce de la avenida Asamblea y la calle Rivera Indarte, cuando Virginia, una vecina de la zona, había abandonado la casa de su madre junto a su hija. "Salimos de la casa de mi mamá, nos estábamos preparando para festejar la Nochebuena en otro lado. Cuando llegamos a la esquina, vemos una moto en contramano, que hacen una U y se dirigen hacia nosotros y en ese momento mi pensamiento fue 'me vacunaron'", relató Virginia.
"Apreté a mi hija contra la pared para protegerla. Entonces, uno se baja, le pone un arma en el pecho y le dice 'china de mierda, dame todo o te quemo'. Yo a mi hija le enseñé que cuando le quieran robar algo, que entregue todo. Lo material va y viene…".
El robo duró menos de dos minutos. El delincuente sustrajo la cartera de la hija de Virginia y se subió rápidamente a la moto, que estaba conducida por un compañero. Justo en el momento en el que el rodado se reincorporó a la calle fue cuando se cruzó con el vehículo gris en el que viajaban Aguinaco junto a su abuelo.
"Bajaron el pianito y se cruzaron con el auto gris, donde iban el abuelo con su nieto. El tipo tiró tres tiros y lastimó a la criatura", completó Virginia.
Un relato similar aportó Pablo, uno de los vecinos del bario, que pudo observar el hecho desde su ventana: "Cuando miré por la ventana, vi una moto estacionada sobre la vereda. Los ladrones se cruzaron con el auto, esperaron que pasara y uno de ellos, sin bajarse, le disparó", afirmó. Brian, que recibió el impacto de bala en su pera, perdió la consciencia de manera inmediata.
Los efectivos policiales, que llegaron al lugar pocos minutos después, encontraron dos vainas de calibre 9mm, que ya comenzó a ser investigada por los peritos correspondientes.
"Es terrible lo que pasó. Esta familia ya perdió a otra criatura. No hay derecho a que les vuelva a pasar algo así", afirmó Virginia.
En tanto, Fernando, el padre de Brian y que trabaja en el Concejo Deliberante de la Municipalidad de Quilmes, subió una foto de él junto a su hijo en la red social Facebook, que fue acompañada con el mensaje: "Hijo, no me bajes los brazos ahora x favor, papi. Sé que la estás luchando y que vas a salir adelante xq sos un pibe muy fuerte y tenés toda una vida x delante para disfrutar… te amo con vida…".
Esa zona del barrio de Flores es conocida como el barrio "de las casitas municipales". Los ladrones lograron esconderse en uno de los tantos pasajes que hay entre sus calles antes de cometer el delito.
En principio, los responsables de la investigación policial buscan cámaras de seguridad de la zona para intentar dar con los delincuentes. Los principales focos de atención están puestos en los ingresos a la villa 1-11-14 y a los barrios Rivadavia I y II.
Por su parte, un centenar de vecinos del barrio ingresaron por la fuerza a la Comisaría 38ª de la zona para protestar por la inseguridad reinante.
En tanto, Brian se encuentra internado en el Hospital Gutiérrez y su situación, de acuerdo con los primeros informes, es crítica.
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