"Proyecto XXX", la violenta fiesta de Moreno que terminó con una batalla campal entre grupos antagónicos de jóvenes y que dejó un adolescente muerto y varios heridos, tenía entre sus consignas -según testigos- "llevar armas, drogas y alcohol". La convocatoria se hizo a través de las redes sociales y según confirmaron fuentes policiales a Infobae, al menos 500 chicos asistieron al evento.
La celebración –que se realizó otros años y en distintos lugares del país- se inspiró en la película Proyecto X, en la que sus protagonistas organizan una impresionante fiesta que incluye todo tipo de excesos. Los organizadores de la celebración de Moreno pretendieron emular lo que se hizo en el film y para ello instaron a los jóvenes a cometer cualquier clase de excesos. Para entrar a la quinta no había controles y el ingreso con armas y drogas era la ley.
Mario, el papá de un joven herido, dijo que adentro de la fiesta había armas, picanas y cuchillos. "Mi hijo recibió un puntazo y un picanazo", precisó.
En caso de que no concurrieran al menos con bebidas alcohólicas, los chicos debían pagar entre 30 y 40 pesos por entrada. Según dijeron a este medio, los organizadores de la fiesta son tres personas, entre ellos una mujer. Al parecer, le alquilaron vivienda a una señora de 70 años, quien dijo que le solicitaron el lugar para hacer una fiesta privada para unas 150 personas y que por eso cobró 4.000 pesos.
La propietaria dijo que los organizadores la engañaron, ya que fueron aproximadamente 500 jóvenes. "Bueno, gente, esta fiesta la hacemos para destangarnos mucho más de lo que hacemos siempre, venite a curar penas, a divertirte, a conocer gente copada de todos lados. La joda va a ser en una quinta con pileta porque acá en la Proyecto XXX vas a tener a las minas más buenas que te perrean hasta el suelo y a los chicos más lindos. La vamos a re explotar", dice parte de la convocatoria a través de Facebook. "Días antes de la joda se pasa la dirección", agregó.
Lo cierto es que el festejo terminó de la peor manera: cientos de jóvenes terminaron envueltos en una batalla campal en la que hubo tiros, corridas, piedras, varios heridos y un joven de 19 años muerto de un balazo en el pecho.
De acuerdo con los testimonios, durante la fiesta comenzaron a pelearse diferentes grupos barriales. "Se arrojaron piedras, hubo disparos de arma de fuego, lo que llevó a la desconcentración de todos los ocupantes del lugar, donde comenzaron las agresiones y corridas, terminando en la vía pública con heridos", dijo la fuente a Infobae.
De acuerdo con el relato de los vecinos, este tipo de fiestas son moneda corriente en el lugar. Un remisero dijo que vio corridas y más de 1.000 chicos. "Iban en grupos de a 30", relató.