Gabriel Oyarzun, hermano del carnicero que mató a un ladrón en Zárate, hizo un pedido desesperado durante la marcha por seguridad que realizaron los vecinos. "Lo quiero al lado mío, no puede ser que esté tras las rejas, no es justo", aseguró entre lágrimas.
"Nos ponen tras las rejas por defendernos", exclamó frente a quienes que lo acompañaron en la manifestación que llegó al municipio. Los vecinos le pidieron a los concejales que se preocupen por la seguridad de la ciudad y reclamaron por la presencia del intendente Osvaldo Caffaro.
Además de reclamar mayor presencia policial en las calles, los manifestantes pidieron la liberación del carnicero y reclamaron mayor seguridad. En esa sintonía, el hermano del comerciante dijo: "necesitamos estar seguros para trabajar. No puede ser que estemos en la parada del colectivo y nos roben".
"¿Por qué tenemos que salir con un arma a la calle para defendernos?", se preguntó Gabriel frente a los micrófonos de la prensa, los concejales y los vecinos que lograron entrar a la Municipalidad. "No solo vine hasta acá por mi hermano, vine por toda la gente que necesita seguridad", afirmó entre lágrimas.
El carnicero Daniel Oyarzun se resistió a un robo en su comercio, persiguió a los ladrones con su auto y mató a uno de ellos luego de atropellarlo. El fiscal de la causa, Martín Zocca, pidió que quede detenido por el delito de homicidio simple. Frente a esta decisión de la Justicia, los vecinos salieron a la calle para pedir la libertad del comerciante.
El intendente de Zárate argumentó que le sacaron "efectivos de fuerzas federales"
"Yo no puedo fabricar efectivos policiales y de seguridad", aseguró el intendente de Zárate, Osvaldo Caffaro. De esa forma, apuntó contra el Gobierno, al que responsabilizó por la falta de policías para brindar seguridad en la ciudad.
Caffaro afirmó que no pudo coordinar políticas de prevención con el Gobierno. "Los efectivos y seres humanos no se puede reemplazar por tecnología", sostuvo. "No podemos hacer magia", señaló frente a los vecinos que ingresaron a la municipalidad para pedir la liberación del carnicero. Muchos de ellos lo increparon e incluso le gritaban "caradura" mientras daba una entrevista televisiva.