Ana Rosa Barrera, la mujer de 46 años que estaba desaparecida en Córdoba desde el pasado domingo, fue encontrada asesinada cerca de la Ruta 5, que une la capital provincial con la ciudad de Alta Gracia.
Fue el esposo de la víctima quien este viernes confesó haberla asesinado y les indicó a los investigadores el lugar en el que la había enterrado. Se trata de Marcelo Javier Ferrareto, quien admitió que la mató a mazazos y la descuartizó tras una discusión.
Ferrareto denunció el lunes que su esposa había desaparecido. Su auto fue hallado abandonado con sus pertenencias en su interior, con excepción de su teléfono celular.
El cuerpo finalmente fue hallado enterrado en un pozo que Ferrareto cavó en un camino de tierra en una zona rural, a unos 200 metros de la Ruta 5, que va a Alta Gracia, cerca de una maderera ubicada al lado del Parque Industrial del Sur.
El confeso asesino quedó detenido. El fiscal Alejandro Peralta Ottonello lo imputó por femicidio y violencia de género.
Barrera y Ferrareto estaban en pareja desde hacía una década y tenían cuatro hijos. Ella trabaja en la Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia (Senaf) de Córdoba. Sus allegados contaron que estaba cansada de los celos de su marido.
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