"Que nuestra televisión pública no privilegie a una parte de la sociedad por sus creencias religiosas o ideología, sino que sea plural, aconfesional y acorde con la Constitución, (…) sin espacios que privilegien a determinadas confesiones religiosas", fue el pedido formulado por Unidos Podemos en el Congreso.
"La sociedad española es muy diversa y plural", argumentaron.
Pero el domingo pasado, 12 de marzo, en réplica a la iniciativa, el espacio que la cadena pública dedica a transmitir la Santa Misa trepó de su habitual 6,6 por ciento a una audiencia de 21,3, lo que equivale a más de un millón de espectadores: 1.217.000, con exactitud. Y, en el momento de la eucaristía, la cifra trepó a 1.341.000 televidentes, es decir, 22,7 por ciento. Un récord histórico para la misa en vivo.
Lo que se dice: ir por lana y salir trasquilado.
Merced a la corrección política, la democracia pasa de gobierno de la mayoría a tiranía de la minoría
El partido progresista Podemos parece querer darles la razón a quienes sostienen que, merced a la corrección política, las democracias están pasando de gobierno de la mayoría a tiranía de la minoría.
Ante el pedido de Podemos, muchas personalidades españolas y el Partido Popular lanzaron una convocatoria en redes: "Para que Pablo Iglesias no nos quite la misa de TVE2 de los domingos, sintoniza el canal ahora".
La respuesta de los católicos fue contundente.
Además, mucha gente enojada reaccionó en los medios. Carlos Herrera, periodista de la radio COPE (nacida como emisora religiosa y que hoy es la segunda más escuchada en España), ironizó sobre el pedido de Podemos, diciendo que "a esa hora (sus afiliados) duermen la borrachera".
Dijo también que el espacio en TVE2 representa "un servicio público para mucha gente que no puede ir a una iglesia y que ve la misa a través del televisor".
Herrera dirigió además sus dardos contra Albert Rivera, del partido catalán Ciudadanos, que apoyó la iniciativa de Iglesias. "Te faltan un par de hervores", le dijo, tratándolo de imberbe. Y le explicó: "Además de ese espacio religioso católico, también hay otro de la iglesia evangélica, de la religión musulmana, de la religión judía… ¿los quitamos todos o sólo los de la religión católica, eh, papa-fritas?".
Ignorantes de esta realidad, los Podemos habían reclamado espacios para las demás confesiones religiosas, algo que ya existe en TVE2, donde islámicos, evangélicos y judíos tienen sus programas.
Lo mismo sucede en la televisión pública argentina, viene bien aclararlo, en la que todos los credos tienen sus emisiones.
Más del 70 por ciento de la población española se declara católica
La Asociación de Abogados Cristianos de España informó a través de un comunicado que "más del 70 por ciento de la población española, según los últimos datos del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) se declara católica, por lo que televisar una misa a la semana, en una televisión que es de todos, es atender los deseos de la mayoría de los españoles".
Habitualmente, la Santa Misa retransmitida en TVE2 tiene un promedio de 300 mil espectadores. Con ese número, es el programa más visto de la cadena pública durante el fin de semana y lleva décadas emitiéndose por ese canal.
No debe extrañar que partidos de impronta marxista reclamen todas las libertades para sí mismos mientras promueven prohibiciones para los demás
Tanto Podemos como Ciudadanos son partidos nuevos en España lo que podría explicar, aunque no disculpar, la falta de conciencia histórica que los lleva a una iconoclasia adolescente y a confundir, quizás, laicismo con ateísmo militante.
Tampoco debe extrañar que partidos de impronta más o menos marxista reclamen todas las libertades para sí mismos pero promuevan prohibiciones para los demás; después de todo han sido y son admiradores de dictaduras y gobiernos autoritarios de izquierda, pasados y presentes.