Según un informe de ex presidentes y ex ministros de educación iberoamericanos que evaluó a jóvenes de 15 años, un alumno argentino de 17 alcanza un nivel de aprendizaje equivalente al de un estudiante chino de 12.
El trabajo "Construyendo una educación de calidad: un pacto con el futuro de América Latina", realizado por la Comisión para la Educación de Calidad para Todos, surge del análisis de la prueba PISA. El documento está firmado por los ex presidentes Ernesto Zedillo de México y Ricardo Lagos de Chile, entre otros.
Aunque se reconocen avances en los últimos años en el aumento de la cobertura escolar y un mayor financiamiento, aún hay deudas por corregir y destacan que hay diferencias educacionales entre estudiantes ricos y pobres.
El informe destaca que los niveles de aprendizaje "son en extremo bajos y desiguales" y que los niños y jóvenes latinoamericanos "simplemente no están aprendiendo a niveles aceptables. Latinoamérica se sigue distanciando con respecto al resto del mundo desarrollado y emergente", sostiene.
Si bien hay un mayor reconocimiento respecto de que mejorar la calidad educativa es imperativo, "la inercia de los sistemas es muy fuerte" y asegura que "romper con esa inercia requiere esfuerzos concentrados de reforma que generen cambios profundos y duraderos".
Con el fin de paliar esas dificultades, el informe propone reformas tales como el desarrollo infantil temprano, la excelencia docente, la evaluación de aprendizajes, utilizar las nuevas tecnologías, una educación relevante y una fuerte inversión para el logro de los resultados.
En el apartado de la Argentina, el estudio destaca que el país "sirve como un caso ilustrativo de la desigualdad del rendimiento educativo en América Latina".
Precisa que en las regiones del Noreste, Noroeste y Cuyo, los alumnos se desempeñaron "por debajo del promedio nacional de matemáticas, lectura y ciencia en el PISA 2012" y remarcó que "en Matemáticas el estudiante promedio del noreste está más de un año de aprendizaje por debajo de su par de la Ciudad de Buenos Aires".
El informe elaborado por expertos de la región destaca que "los estudiantes de Cuyo, la región que tiene el puntaje en promedio más bajo de todo el país, se desempeñan, pero que los de Perú, son del país de más bajo nivel de los 65 que participaron en la prueba PISA".
"Aún dentro de las mismas regiones en la Argentina existen enormes brechas de rendimiento entre alumnos provenientes de distintos grupos socio económicos", sostiene el estudio y remarca que "en la Ciudad de Buenos Aires, la brecha entre el puntaje de los estudiantes de nivel económico más bajo y más alto constituye casi cuatro años de aprendizaje en lectura y ciencia".
Ariel Fizbein, director del Programa Educación Diálogo, que constituyó la comisión para realizar el estudio, aseguró que los bajos niveles de aprendizaje hay que buscarlos en la región en el deficiente desarrollo de la educación inicial, "qué certezas hay sobre cómo llegan los niños en el primario, y la necesidad de buscar la excelencia docente con la meritocracia, en la que sólo los mejores estudiantes sigan la carrera".
El plan se presentó ayer en conjunto con el Ministerio de Educación en la Casa Rosada, con la asistencia del jefe de Gabinete Marcos Peña, el ministro Esteban Bullrich, y el ex presidente de Chile Ricardo Lagos.
La Comisión de ex presidentes y ministros del área destacó la necesidad de un "pacto social ya que las reformas que se necesitan no son sencillas, requieren recursos, compromiso en el tiempo" y aseguró que el cambio "difícilmente sea lineal, debe haber espacio para ensayo y error, ni tampoco debe imponerse de manera autoritaria y verticalista, precisa altos niveles de consenso y participación social, incluidos los propios educadores".
El ministro Bullrich aseguró que "encaramos programas para revertir la situación" y remarcó que "se está cambiando la tendencia". Señaló que el informe "describe la política que estamos llevando a cabo, estamos en el camino correcto".