Vive de su trabajo como empleado del gobierno de Japón. Los ingresos los obtiene producto del desempeño como funcionario en el ayuntamiento de Saitama. Pero en realidad vive para correr. Su deseo, su pasión, no pasa por la labor que lo ocupa de 13 a 21 horas de lunes a viernes. Él solo se la pasa pensando en la próxima carrera.
Yuki Kawauchi es un atleta de 30 años que se convirtió en un fenómeno mediático que excedió las fronteras del país asiático. Apodado el "citizen runner", (corredor ciudadano) es un hombre de retos que no tiene recaudos en exponer su físico a pruebas exigentes para un aficionado, y sin perder su estilo, como cuando completó una media maratón vestido de traje.
Aquella singular ocasión, que marcó un punto cúlmine en su carrera, mostró de manera fehaciente su filosofía de vida. Ataviado de pantalón, camisa, corbata, chaleco y chaqueta, recorrió la media maratón Kuki de Saitama, finalizando con 1h 06:42, un tiempo que hubiese sido reconocido como récord Guinness (el registro actual es 1h 24:41), si la prueba hubiese estado oficialmente registrada.
Considerado el mejor corredor amateur del mundo, la máxima gesta de Yuki es desafiar la performance de la élite. Hace al menos diez maratones anuales, una frecuencia inusitada para el ambiente profesional, que rara vez supera los tres o cuatro al año. Corre más que nadie. Y lo hace solo por el placer de practicar la actividad.
Kawauchi revolucionó el concepto de deportista de alto nivel: además de duplicar la media de los maratonistas profesionales y trabajar 40 horas semanales, no acepta los aportes de patrocinadores y no tiene entrenador. "Quiero mantener mi independencia, correr donde quiero y cuando quiero", aduce. Cuando viaja para competir, lo hace a cuenta de días de vacaciones.
Su apego por el deporte se remite a ocho años atrás, en el debut en la maratón de Oita, en 2009, donde registró una valorable marca de 2h 19:26, que le valió el vigésimo puesto. Aunque ya desde pequeño practicaba recorridos de trayectos a pie en Setagama, un barrio de Tokio, y su localidad natal. Hoy, ya superó las 70 maratones.
Su año más productivo fue en 2014, cuando compitió en trece ocasiones. El año pasado bajó la cantidad: fueron nueve en total. Y en este 2017 ya lleva cinco: Matsuyama, Daegu, Praga, Estocolmo y Gold Coast. Del total de carreras disputadas hasta ahora, ganó en 26 ocasiones. Su más destacada marca llega a las 2h 08:14, lograda en Seúl, en 2013.
En el Mundial de Atletismo de Londres, que inicia a partir del próximo sábado, representará a Japón por tercera vez: ya participó en las ediciones de 2011 (en Daegu, culminó 17º) y 2013 (en Moscú 2013, acabó 18º).
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