"La inactividad física se encuentra entre los 10 principales factores de riesgo de mortalidad a nivel mundial", así lo estipula la Organización Mundial de la Salud. Pero además, advierte que realizar 150 minutos de ejercicio aeróbico de intensidad moderada por semana disminuye el riesgo de una muerte prematura.
Se estima que el sedentarismo es la causa principal de aproximadamente un 21%-25% de los cánceres de mama y de colon, el 27% de los casos de diabetes y aproximadamente el 30% de la carga de cardiopatía isquémica.
Un grupo de investigadores decidió corroborar estas indicaciones y realizó una encuesta en más de 661,137 adultos de edad media. Este sondeo de salud fue comparado con los registros de mortalidad de los útlimos 14 años. Lo resultados fueron contundentes.
Para lo sedentarios – el riesgo de muerte prematura por cáncer o alguna enfermedad de origen cardiovascular es el más alto. En los adultos que se entrenaban con poca frecuencia – menor a la estipulada por la OMS- el riesgo se reduce un 20%.
Por otra parte, los que seguían al pie de la letra la recomendación las probabilidades disminuyen un 31%. Para quienes abusan y se sobrecargan su resistencia personal -triplicando e jercicio, es decir una hora todos los días- tienen un 39% menos de posibilidades de contraer enfermedades que concluyan en un desceso.
A partir de estas cifras, los especialistas, percibieron que los valores se estancaron. Determinando que el deseo de mejorar la calidad de vida o la meta de alcanzar un mejor rendimiento deportivo puede llevar al sobreentrenamiento, lo que no es necesariamente repercute de manera favorable en la salud.
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