La miocardiopatía hipertrófica es una enfermedad cardíaca hereditaria, cuyo máximo alcance puede ser fatal. De hecho, es la causa más frecuente de muerte súbita entre las personas jóvenes y entre los deportistas. Hasta el momento para esta fase avanzada no cabía otra alternativa que recurrir a un trasplante cardíaco. Pero científicos estadounidenses desarrollaron una nueva técnica para intervenir quirúrgicamente a pacientes que padecen un tipo de esta enfermedad.
El nuevo método, desarrollado por cirujanos de la Clínica Mayo de Rochester, EEUU, está orientado a aquellos pacientes que padecen una miocardiopatía hipertrófica de tipo apical y medioventricular, lo que significa que tienen muy engrosadas las paredes cardíacas en la zona más baja del corazón. Esto impide que el órgano pueda bombear la sangre con normalidad.
La intervención, a la que denominaron miectomía transapical, consiste en acceder al corazón de los pacientes mediante una incisión en la punta de este órgano con el fin de reducir el engrosamiento y conseguir ampliar la cavidad del ventrículo afectado, para permitir un mejor llenado del corazón. Si el engrosamiento de las paredes del corazón se produce en la parte alta, los cirujanos cardíacos acceden al mismo con otra técnica a través de la aorta y realizan una intervención similar llamada miectomía transaórtica, que también se realiza en muy pocos centros del mundo.
Una vez que se les practica la operación, si los controles se presentan de manera satisfactoria en un plazo de una semana es posible dar el alta. El plazo mínimo para recuperar la capacidad de esfuerzo es de dos meses. Ya se realizaron más de 100 intervenciones en distintas partes del mundo y por primera vez este método se llevó a cabo en Europa, con las dos primeras operaciones en España.
"La miectomía se hace desde hace muchos años. Consiste en sacar un pedazo de músculo del sectum interventricular. En una miocardiopatía hipertrófica, lo que frecuentemente se engrosa mucho es el tabique que separa el ventrículo izquierdo del derecho. Lo que están planteando ahora es un nuevo abordaje quirúrgico, que se realiza desde la punta del corazón para poder resecar una parte de ese senctum, que está engrosado en este caso en el medio y la parte apical", dijo Alejandro Hita, jefe de Cardiología del Hospital Universitario Austral.
La enfermedad en detalle
La miocardiopatía hipertrófica generalmente se transmite de manera hereditaria. Las personas más jóvenes son más propensas a presentar una forma más grave. Sin embargo, se observa en personas de todas las edades. En muchos casos los afectados no presentan síntomas pero puede producir fatiga, palpitaciones, dolor en el pecho, arritmias y, en el peor de los casos, la muerte súbita.
"En general en el mundo hay un paciente con miocardiopatía hipertrófica por cada 500 personas, aproximadamente. Es una enfermedad de transmisión dominante, lo que se llama autosómica dominante, o sea que es de transmisión genética con un grado de penetrancia bastante fuerte. Es muy importante saber esto, porque si alguien la padece, se debe estudiar a sus descendientes: la posibilidad de que también la tengan es del 50%", explicó el especialista.
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