Con el ánimo de trasladar a otros ámbitos de la realidad nacional y también al mundo la larga y exitosa experiencia interconfesional que tiene la Argentina, tuvo lugar en Buenos Aires este III Congreso Mundial de Diálogo Intercultural e Interreligioso "Una Senda Hacia la Paz", con la presencia de importantes autoridades de todas las religiones y de destacadas personalidades del ámbito académico, diplomático, político, social, sindical del país y del mundo.
"Es necesario que los argentinos dejemos de lado el individualismo y empecemos a escucharnos si queremos sacar este hermoso país adelante", dijo Gustavo Guillermé en la apertura del Congreso de que es presidente y fundador. Además pidió tomar "como ejemplo el exitoso diálogo interreligioso que se vive en Argentina desde hace muchos años; es muy importante que nuestros políticos entiendan que hay que dejar de lado las mezquindades y tenemos que sentarnos a refundar una Argentina, más allá de nuestras creencias religiosas o ideas políticas".
La propuestas surgidas de este Congreso le serán presentadas al presidente Mauricio Macri "para que sean estudiadas por los miembros de la próxima Cumbre del G20" que tendrá lugar el 30 de noviembre en Buenos Aires.
Entre las personalidades religiosas presentes, se contaba monseñor Oscar Ojea, presidente de la Conferencia Episcopal Argentina, monseñor Tarasios, Arzobispo Metropolitano de la Arquidiócesis Ortodoxa Griega de Buenos Aires y Exarca de Sudamérica, Arzobispo Kissag Mouradián, Primado de la Iglesia Apostólica Armenia de Argentina y Chile, Arzobispo Eric Escala, Presidente de la Comunión Anglicana Episcopal Ortodoxa, etcétera.
El Congreso tuvo lugar en el Auditorio Belgrano de la Cancillería argentina y también contó con la presencia de dos ex primeros mandatarios latinoamericanos.
Los ex presidentes Luis Lacalle De Herrera, de Uruguay, y Federico Franco Gómez, de Paraguay, participaron de la Mesa "Entre la crisis de las religiones y el crecimiento de la corrupción".
Para Luis Lacalle, "si existe un Estado de Derecho, si hay una prensa libre, sí tenemos un sistema parlamentario que investigue y si la justicia trabaja de manera independiente se puede eliminar la corrupción".
Algunos de los temas tratados en este Congreso, que se realiza por tercer año consecutivo, fueron: refugiados y migrantes; la Religión en la Política; Religión, ciencia y bioética; la democracia en América Latina, entre crisis religiosa y avance de la corrupción; trata de personas, Laudato Sí, etcétera.
Hubo coincidencia en los distintos paneles en "la necesidad de construir puentes y trabajar en el diálogo para cerrar la famosa grieta en beneficio del bien común".
El Congreso también distinguió el compromiso social de algunas personalidades, como el doctor Abel Albino, creador de la Fundación CONIN, Bettina Bulgheroni, presidente de la Fundación Educando Argentina y Margarita Barrientos, Fundadora del Comedor "Los Piletones". "Es necesario terminar con la eterna guerra del hombre contra el hombre, e iniciar todos juntos la única guerra que vale la pena, la única en que todos ganan, la guerra del hombre contra el hambre", dijo el doctor Albino al agradecer la distinción.
Pese al carácter estratégico de los temas tratados, la coyuntura se coló inevitablemente en los debates, por la presencia de personalidades como Anselmo Gabbi, presidente de la Bolsa de Comercio, que participó de una mesa sobre "Trabajo en equipo para la construcción de una nueva Nación", junto con el vicegobernador de Tierra del Fuego, Juan Carlos Arcando, el secretario general de la CGT, Juan Carlos Schmid, y Gastón Zilbergleijt, CEO de Compañía Fiduciar. Gabbi se declaró "optimista" porque cree "que por primera vez en muchísimos años vamos a tender a un presupuesto con déficit fiscal cero". "Es verdad que va a depender en gran parte de las reuniones que puedan tener el presidente Macri y el ministro Frigerio con los gobernadores, pero la verdad es que el esfuerzo de los privados que va a ser inmenso, mucho mayor que el de la política como siempre en este país, esta vez no va a caer en saco roto, vamos a ir hacia un país con déficit cero y ese es el principio de la Argentina del futuro", explicó.
También participó de uno de los paneles el ex secretario general de la Presidencia de Carlos Menem, Alberto Kohan, quien rechazó comparar al actual gobierno con los '90: "En nuestro gobierno había estabilidad e inversión extranjera".
"En Argentina falta diálogo y tenemos que trabajar para la paz, para cerrar la famosa grieta. La solución real para la Argentina es la propia Argentina, no es lo que nos puedan prestar los de afuera", agregó y llamó al gobierno nacional a "generar confianza y no cambiar tanto las reglas de juego".
Sergio Bergman, secretario de Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable, tuvo que responder a consultas sobre la flamante reorganización ministerial, que definió como "un gesto de responsabilidad y empatía", porque "lo que pasa en la estructura del gobierno es un reflejo de lo que pasa en la realidad". "Es un gesto de sensibilidad del Presidente de atender el reclamo y los pedidos que vienen haciendo desde distintos sectores. En definitiva no cambia nada, lo único que hay que saber administrar es el ego y ponerse al servicio de esta causa, que es cambiar la Argentina", explicó.
Según sus organizadores, el Congreso Mundial de Diálogo Intercultural e Interreligioso – busca constituirse "como un encuentro social, político, académico y diplomático en pos de configurar una agenda de diálogo con eje en la Argentina que abarque los principales temas socialmente problematizados".
"Afortunadamente en nuestra región el diálogo es muy importante. Desde los comienzos, impulsado por el cardenal Antonio Quarracino y ahora con el fortalecimiento internacional de la mano del Papa Francisco", destacó Gustavo Guillermé.
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