En la cuenta regresiva de cara a las PASO las apariciones del Presidente en los actos de campaña se intensifican. En esta oportunidad, Mauricio Macri visitó Santa Fe, donde cargó con dureza contra el kirchnerismo.
"Cuando escucho a los que gobernaron decirnos que ellos tienen soluciones, ellos que después de tantos años de gobernar nos dejaron problemas y ruinas, no lo puedo creer", aseguró el jefe de Estado. "Quieren que nos vaya mal para recuperar el poder", agregó.
De esta manera, Macri lanzó fuertes críticas contra la fuerza política que gobernó el país en la última década, aunque evitó nombrar a la ex presidente Cristina Kirchner. "Vuelven con el miedo y con los pronósticos de las cosas horribles que nos van a pasar", sostuvo.
El jefe de Estado aseguró que en términos económicos el país "empezó a crecer" y que el año próximo "va a crecer más". "Va a haber más obras públicas y más trabajos. Vamos a estar mejor", afirmó.
Por otra parte, se refirió a la lucha de su gobierno contra el narcotráfico. Contó que durante su gestión se decidió enviar a Santa Fe, una de las provincias más afectadas por la comercialización de drogas, cerca de 3.000 agentes federales.
"Estamos trabajando para dar una batalla sin cuartel hasta que echemos a patadas de la Argentina al narcotráfico", sostuvo en el tramo final del acto. Y agregó: "Vamos a seguir quemando y quemando droga, hasta que se den cuenta que acá no va más".
"No voy a aceptar ninguna excusa para complicidades con el narcotráfico por parte de la política, la Justicia, la policía o el empresariado. A los que agarremos, van a ir presos como fueron los de Itatí", advirtió, en referencia al ex intendente de esa localidad correntina, Roger Terán, que fue detenido y acusado de connivencia con narcotraficantes.
Durante su visita, el Presidente se reunió el gobernador santafesino, Miguel Lifschitz, con quien charló sobre la situación en la Provincia.