No hubo foto oficial, pero una imagen que circuló en las redes sociales generó sorpresa. Entre reunión y reunión, la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, hizo una pausa en su agenda para almorzar con su hijo Pedro una ensalada en un local de Mc Donald's en la ciudad de La Plata.
Ayer por la mañana, Vidal participó de un acto en la localidad de Lomas de Zamora junto al intendente Martín Insaurralde en donde entregó 966 chalecos blindados para efectivos de las fuerzas de seguridad bonaerense. Al finalizar el encuentro, y camino a la sede gubernamental provincial, almorzó con su hijo en el local de comidas rápidas.
No es la primera vez que la Gobernadora sorprende con actitudes poco habituales para la política argentina. En otra ocasión la fotografiaron en un supermercado y suele recorrer las guardias de los hospitales provinciales para relevar el trabajo de los profesionales.
Sobre los chalecos entregados para los efectivos de la policía bonaerense, se informó de manera oficial que del total, 518 son femeninos pertenecientes a la categoría RB3 (chalecos de resistencia balística utilizados por los grupos comando y por la Bridaga Especial Operativa Halcón), según las normas estipuladas por el Registro Nacional de Armas (RENAR).
Además, tienen la particularidad de adaptarse al pecho femenino y cuentan en su interior con un chip de identificación por radiofrecuencia que incluye los datos del efectivo, la dependencia a la que pertenece, marca y número de serie, entre otros.