La gestión de Juan José Aranguren al frente del ministerio de Energía no genera polémica sólo por los tarifazos de luz y gas: el funcionario es cuestionado por la oposición debido a que desde su cargo podría beneficiar a Shell, compañía en la que posee 16 millones de pesos en acciones.
En ese contexto, la titular de la Oficina Anticorrupción (OA), Laura Alonso, admitió que se está evaluando si allí hay incompatibilidad o choque de intereses que ameriten una intervención del ente que preside.
"El caso del ministro Aranguren es el más complicado que tiene en estudio la Oficina Anticorrupción", admitió la dirigente macrista en diálogo con La Once Diez. "El equipo está analizando el tema y en pocas semanas va a estar el resultado final", prometió.
Alonso consideró que el volumen de acciones de Shell que posee el titular de la cartera de Energía "es minimísimo", porque son papeles "de la compañía internacional, no de la filial local. No es tan blanco ni negro".
De todos modos admitió que el caso merece ser revisado y adelantó que en breve podría haber una alerta: "Esperamos tener en las próximas semanas una recomendación preventiva para el ingeniero Aranguren, a fin de que cualquiera sea su actuación, él evite, a través de una delegación de decisión y firma, caer en un conflicto de intereses".
La máxima responsable de la OA reveló que "se están analizando 22 casos" de funcionarios y todos se irán definiendo paulatinamente.
Antes se envían recomendaciones a los dirigentes que están bajo la lupa, "para que se abstengan de realizar determinadas cuestiones o se deshagan de compromisos laborales que pueden tener de su vida, antes de ser funcionarios. Si no lo hacen, un juez podría condenarlos por mal desempeño o abuso de autoridad", finalizó.