Continúan los movimientos en el mercado de pases europeo y sin dudas, la del fin de semana fue una bomba. En una de las transferencias más importantes de la historia, la Juventus abrochó a Gonzalo Higuaín por unos 95 millones de euros. Y al margen del malestar que ocasionó este fichaje, en el Napoli se pusieron manos a la obra para hallarle un reemplazante al goleador. Justamente un compatriota suyo figura en el radar: Mauro Icardi.
El atacante argentino que convirtió 16 tantos la temporada pasada (quedó cuarto en la tabla, detrás del Pipita, Paulo Dybala y Carlos Bacca) es el apuntado por la entidad napolitana para cubrir la importante baja en la ofensiva. Los rumores indican que ofertarán 40 millones de euros para contar con sus servicios, pero el club "neroazzurro" realizó advertencias públicas.
Quien tomó la palabra fue Piero Ausilio, director deportivo: "Mauro no se vende, es nuestro capitán. Al Napoli no lo damos, no es una cuestión de dinero; no nos interesa qué pueda ofrecer". Evidentemente para los dirigentes interistas lo económico no es primordial y sí cuestiones vinculadas a la rivalidad futbolística, que pueden llegar a trabar la transacción.
La mujer y representante de Icardi, Wanda Nara, aguarda por la renovación y actualización en los números de su contrato, aunque por el momento en la institución milanesa no tienen planificado mantener una reunión con ella: "Ahora no es el momento, lo haremos cuando haya menos exposición mediática".
En los últimos días, el apellido del rosarino de 23 años había sonado en el Arsenal inglés. Esta semana puede ser clave para que se defina su futuro.