Sólo dos mujeres caucásicas habían sido vistas tatuadas antes de ella.
Arriba del cuello parece una mujer de la era victoriana común y corriente, pero más abajo podría pertenecer al siglo XXI. Maud Wagner es la primera mujer tatuadora reconocida en los Estados Unidos.
En 1907 su cuerpo estaba cubierto de tatuajes que su esposo diseñó, muchos inspirados en tierras lejanas que él mismo visitó mientras era un mercader.Desde entonces que pasaron a formar parte de un pedazo enorme de lo que es la cultura mainstream.
Antes de conocer a su esposo, Maud era una contorsionista que trabajaba en un circo que hacia tours por el país. Fue ahí cuando conoció a Gus Wagner, quien la introdujo al mundo del tatuaje.
Casi todos los tatuajes en el cuerpo de Maud fueron hechos por su esposo. La mayoría eran criaturas salvajes y mitológicas, plantas exóticas, mujeres indígenas.
Sin embargo y lamentablemente, no existe ningún registro de los tatuajes que Maud diseñó. Antes de ella, ninguna mujer había entrado en este círculo dominado principalmente por hombres.