La arquitectura no se detiene. Año a año se renueva con nuevas construcciones. Edificios rupturistas que prefieren ir a contracorriente de los estereotipos. Planos diferentes, formas incongruentes, apuestas osadas. La arquitectura en cada año deja su legado. 2017 no fue la excepción.
Pierre Boulez Saal
El teatro se reinventó en Berlín con la llegada de Pierre Boulez Saal, una sala de 360 grados, donde cada asiento es un lugar de privilegio. Diseñado por Frank Gehry y el japonés Yasuhisa Toyota, el espacio revestido de madera tiene dos áreas de asientos ovaladas. Una de ellas rodea al escenario; la otra parece flotar sobre el espacio.
Además de la audacia de su concepto, a contramano de las salas tradicionales, el Pierre Boulez Saal, fue concebido como parte de la nueva Academia Barenboim-Said, una escuela que se esfuerza por unir árabes e israelíes a través de la música. Su declaración excede lo artístico y deja un mensaje político.
El pueblo de montaña de Huanghan
El arquitecto Ma Yansong supo cosechar su prestigio internacional en Pekín gracias a la creación de dos de los edificios más disruptivos de China. Por un lado, el Sheraton Huzhou Hot Spring Resort, un curioso hotel con forma de donut. Por otro, Harbin Opera House, uno de los teatros más extravagantes e imponentes del mundo. Sin embargo, fue por más y lo logró con Huanghan Mountain Village.
El pueblo de montaña busca conjugar lo natural y lo artificial. Su desarrollo consta de estructuras de planos apilados cuyo diseño emula la topografía de la cordillera. El proyecto se utilizará para múltiples y variados propósitos. Entre ellos, un espacio de eventos, un hotel y una vivienda local.
Louvre Abu Dhabi
Había planes de inauguración para 2013, pero su llegada se demoró más de la cuenta. El nuevo Louvre en Abu Dhabi abrirá sus puertas en noviembre. Se trata de una isla flotante híper exclusiva que costó 19.400 millones de dólares.
Dentro de la estructura abovedada, de casi 25 mil metros cuadrados, habrá obras de arte antiguas y de actualidad, que incluirán, por caso, estatuas de bronce de Egipto e India. Su irrupción, sin embargo, causó controversia en el mundo del arte por su imagen superficial y ostentosa, con el objetivo de transformar la cultura en dinero.
Pandora – Disney
No es necesario ser un fanático de la película para salir maravillado del nuevo parque de Disney, Pandora: The world of Avatar, una tierra de 5 hectáreas que recién se inauguró en Animal Kingdom, en Orlando.
La construcción del parque de Avatar insumió seis años y medio billón de dólares. Parecido a una selva, plagada de arroyos, cuevas y bosques. En el medio, montañas rusas que llenarán de adrenalina a sus tripulantes. La pieza central: el Avatar Flight of Passage, un paseo que combina realidad virtual y movimiento en 3D y transporta a los visitantes a una gira aérea por las criaturas nativas del planeta.
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