Le Corbusier dijo una vez: "La arquitectura es cuestión de armonías, una creación pura del espíritu. Empleando piedra, madera y hormigón, se construyen casas y palacios. Eso es construcción: el ingeniero trabajando; pero en un instante, toca mi corazón, me hace bien, me siento feliz y digo: esto es hermoso, esto es arquitectura. El arte entra en mí".
Desde que el hombre comenzó a construir refugios, los diseños de a poco comenzaron a avanzar de simples y rústicas estructuras hasta las colosales catedrales del mundo. La ambición y creatividad humana no tiene límites. Sin embargo, durante los últimos tiempos, con la crisis habitacional y los elevados precios, la arquitectura se revirtió hacia la funcionalidad que tanto predicaba Le Corbusier.
Un gran ejemplo de esta tendencia es la casa prefabricada ubicada en la Finca Aguy en Maldonado, Uruguay. Creada por el estudio binacional MAPA y construida en una fábrica cerca de Montevideo por una empresa llamada Lutron. Viajó más de 200 kilómetros hasta llegar al sitio en el que se encuentra hoy en día.
Ubicada más precisamente en el paraíso escondido que es Pueblo Edén, esta estructura prefabricada es la perfecta combinación entre industria y paisaje. "Construir en territorios alejados de nuestros alrededores en los que vivimos usualmente es un gran desafío", aseguraron desde el estudio.
"Paisajes aislados nos confrontan con la certeza de la inmensidad. Nos pone en nuestro rol en la realidad. La lejanía no como un límite sino como una posibilidad, como valor, como un generador de condiciones. En paisajes de alto valor natural, es fundamental respetar su condición original, por lo que es esencial una condición reversible. La prefabricación nos permite trabajar con materiales industriales que permiten el uso de procesos de alta precisión."
Por lo tanto, el impacto de la construcción en el suelo se amortiza, se minimizan los desechos, los trabajadores en el lugar y desplazamiento, por lo que se crea una perfecta combinación de naturaleza y construcción. "Las casas no se mueven. Están hechas con materiales pesados, erigidas con argamasa, y se debe utilizar cemento. Es difícil romper con estos prejuicios, así también como con la inmovilidad de la construcción", aseveran los arquitectos. "Por el otro lado, las casas prefabricadas son producidas en un ambiente controlado y hechas con cuidado. nacen en una fábrica y son llevadas a su destino final. Las casas no se mueven. Y sin embargo…".
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