El índice Merval de la Bolsa de Comercio porteña recortó 4,8%, a 20.614 unidades, tras la decisión del gestor de índices MSCI de no incorporar a la Argentina a su referente de mercados emergentes. Las empresas energéticas encabezaron las pérdidas más notorias y Pampa Energía perdió 8,4 por ciento.
Como era de prever, el cambio rotundo en el escenario financiero local se tradujo en un recorte de los precios de los activos. En las operaciones en Wall Street arreciaron los números rojos para los ADR argentinos que allí se operan: YPF cedió 5,2%, a USD 21,04; Grupo Financiero Galicia cayó 5,5%; Banco Macro resignó 3,6% y Edenor restó 3,7 por ciento.
"Era de esperarse que no se incluiría a Argentina en esta evaluación para el índice MSCI. Argentina ha hecho muchos cambios 'pro mercado' a nivel macroeconómico y en materia de déficit fiscal, pero aún no son suficientes para ingresar a la categoría de mercados emergentes", explicó a Infobae Pablo Gao, director de R&B – Riesgo&Beneficio.
"Sin embargo, sigue abierta la posibilidad de ingresar al índice durante la próxima evaluación. Con la creación de ByMA, un mercado más eficiente, transparente y de mayor volumen, aumentarían las probabilidades de ingresar al índice en el futuro cercano. Seguramente el mercado volverá a tomar en cuenta este punto, y volverá a apostar por Argentina con una visión a más largo plazo", evaluó Gao.
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El gestor de índices MSCI decidió no incorporar a la Argentina a su referente de mercados emergentes, debido a la preocupación de los inversores, que aún esperan a ver que las reformas de mercado puedan mantenerse largo tiempo para que "sean irreversibles".
"A nivel mercado podemos esperar una toma de ganancias, pero no cambiará la tendencia alcista del mercado local, que está sostenido por una enorme exceso de liquidez local, acompañado por una baja tasa de interés, un dólar estable y pocas opciones de inversión", advirtió el experto de R&B.
La decisión fue una sorpresa para los agentes bursátiles, que siguieron con expectativa la noticia que deja al país en zona de frontera y menos atractivo para las inversiones de grandes fondos, cuyas carteras acumulan unos USD 1,5 billones a nivel global y cuyo destino se basa en los registros de mercados emergentes de MSCI.
Un informe de Research for Traders indicó que "la incertidumbre que tienen los inversores acerca de las elecciones legislativas de octubre y la débil recuperación que muestra la economía doméstica también alimentan la corrección que están sufriendo los precios de los bonos".
El riesgo país, indicador de JP Morgan, que mide el diferencial de tasa de los bonos del Tesoro de los EEUU con sus pares de la región, se incrementó 3,5% para la Argentina y se ubicó en los 426 puntos básicos. Los títulos públicos retrocedieron 0,9% en el Mercado Abierto Electrónico (MAE).
"Creemos que Argentina puede ser golpeada en un primer momento, porque las expectativas de que se le incluyeran eran muy altas", dijo a Reuters Lucy Qiu, analista de mercados emergentes de UBS Wealth Management en Nueva York. "Aún pensamos que puede ser un caso positivo en el largo plazo pero hay que prepararse para una debilidad temporal", agregó.
"La decisión de no subir de categoría a Argentina pudo ser una decepción para muchos inversores", apuntó la gestora de fondos de BlackRock, Emily Fletcher, quien destacó de todos modos "los sustanciales cambios macroeconómicos del país en el último año".
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