Junio arrancó con subas en los autos 0 km: cuáles son los precios de las marcas que ya anunciaron sus nuevas listas

Aunque los aumentos sean mucho menores a la inflación, y los movimientos de precios ya no sean una variable tan decisiva en la compra de un auto 0 km, como sí lo es la brecha entre del dólar oficial y el paralelo, la información oficial de las marcas respecto a su política de precios sigue siendo un índice que los actores económicos de Argentina siguen esperando cada inicio de mes como un dato relevante.

De hecho, aunque tiene una incidencia baja en la inflación oficial que mide el Indec cada mes, el supuesto aumento que planeaban las automotrices luego de la salida del cepo a mitad de abril, fue lo que encendió todas las alarmas en el Ministerio de Economía y llevó a su titular, Luis Caputo, a tener una reacción inesperada en redes sociales un mes atrás, presionando públicamente para que esos incrementos no fueran tan altos como había trascendido.

El último día hábil de mayo, nuevamente Ford “tomó la posta” que históricamente tuvo Toyota y marcó el escenario para el resto de las automotrices, anunciando un aumento para los precios de junio en un promedio del 2%, con modelos que no aumentaron y otros que lo hicieron cerca de un 3%, especialmente en la gama de vehículos importados de extrazona, los que pagan arancel del 35% de importación por provenir de Estados Unidos o Tailandia.

De este modo, Ford Territory tiene su versión más accesible en $41.470.300; Bronco Sport en $51.919.500; Kuga Híbrida en $68.767.600; Ford Everest en $78.900.000; y Ford Bronco V6 en $121.076.600.

En el rango de las pick-up, la Ford Maverick arranca con un precio de $46.762.000, la pick-up nacional, la Ford Ranger, inicia su gama de modelos 4x2 en $43.387.000 y 4x4 en $48.832.000; y entre las importadas de extrazona, la Ranger Raptor tienen un precio de $101.959.200 y las F-150 inician la gama en $114.704.100 en adelante.

Este aumento fue menor al que muchos actores del sector esperaban para este mes. La marca americana fue a única que no tocó los precios ni en la segunda quincena de abril, ni tampoco en las listas de mayo. Martín Galdeano, presidente de Ford Argentina y Ford Sudamérica, dijo entonces que no era momento de aumentar los precios tras la devaluación del peso una vez que comenzó a regir el actual sistema de flotación del dólar.

Toyota, en cambio, decidió anunciar su lista de precios de junio recién este lunes, porque el sábado fue un día normal de ventas en la red de concesionarios. Así, este lunes publicaron sus nuevos valores, en los que el aumento fue levemente menor que los de Ford, ya que promedia el 1,9% en el total de modelos que comercializa en Argentina.

Así, el Toyota Yaris tiene ahora un precio de acceso a la gama de $25.261.000, el Toyota Corolla inicia su línea con un modelo en $32.121.000, el Toyota Corolla Cross empieza en los $40.314.000, Hilux 4x2 DC en $41.173.000 y 4x4 DC en $41.799.000, y Toyota SW4 tiene su versión de acceso en los $72.683.000.

Pasado el mediodía del primer día de la semana, General Motors Argentina comunicó también su lista de junio, en la que el promedio de incrementos es menor al de los otros dos fabricantes que anunciaron su política de precios, que promedia el 1,2%.

Mientras la pick-up Chevrolet Montana mantuvo su precio sin alteraciones, el SUV 4x4 Chevrolet Trailblazer tuvo un aumento del 3%. El Chevrolet Tracker, el único producto nacional de la marca, tuvo un incremento variable de acuerd a las versiones.

La lista de precios muestra la gama del Chevrolet Onix que arranca en los $26.655.900; el Chevrolet Spin en $28.622.900; Chevrolet Tracker en $29.394.900; la pick-up Montana quedó en $29.890.900; las camionetas de una tonelada Chevrolet S-10 desde $39.790.000; la Trailblazer en $67.165.900; y las Silverado a partir de los $97.169.000.

En el sector estiman que este mes las listas se conocerán en un lapso menor de tiempo de lo habitual, generalmente Stellantis publica último cerca del fin de la primera semana, en función de los incrementos que ya hubo en mayo y de una posición del dólar oficial relativamente estable.

Esto les permite adaptarse de mejor modo a las fluctuaciones de valores y costos, tanto para los autos producidos localmente, que tienen un componente cercano al 50% o 60% de partes importadas, como de los propios autos importados en su totalidad.