La nueva conducción del Indec dio a conocer su segundo informe de la Encuesta Permanente de Hogares, correspondiente al cuarto trimestre de 2016, mientras que no procesó la de igual período del año anterior.
La fotografía determinó una leve mejora en la formalidad laboral en el primer trimestre de vigencia del blanqueo de activos. Los asalariados sin descuento jubilatorio pasaron del 33,8% a 33,6% del total de los trabajadores en relación de dependencia, los cuales mantuvieron una participación en el mercado total del 75,4 por ciento.
Sobre un total estimado de unas 18 millones de personas ocupadas en todo el país, se estima que 13,58 millones lo hicieron en relación de dependencia, de las cuales 9 millones aportaron al sistema de jubilaciones y obra social, y 4,56 millones se desempeñaron en la informalidad; en tanto otras 4,42 millones de personas lo hicieron en carácter de autónomo, monotributista, empleado de casas particulares y monotributista social.
Sobre 18 millones de ocupados, 9 millones lo hicieron como asalariado en blanco; 4,6 millones asalariado en negro y 4,4 millones por cuenta propia
En comparación con los tres meses previos, la Encuesta Permanente de Hogares arrojó mínimas variaciones relativas, pero que adquirieron singular relevancia cuando se las proyecta a la población total de trabajadores empleados.
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Variaciones relativas y absolutas
La estadística fría determinó que las tasas de participación de trabajadores en relación de dependencia y de independientes no se movieron entre la medición a septiembre y la de diciembre de 2016. En cambio, se redujo en dos décimas de punto porcentual la proporción de asalariados sin descuento jubilatorio.
En ese período, de la EPH surgió que el empleo disminuyó en unas 45.400 personas, al parecer por factores estacionales que se manifestaron en la disminución de la oferta laboral, en particular en la rama de la construcción, de las cuales unas 11.200 lo hacían por cuenta propia y 34.200 como asalariado. Estos últimos se desagregaron en 38.600 personas que estaban ocupadas en la informalidad y en apenas 4.540 que se incorporaron a la economía en blanco, una proporción de apenas poco más de una de cada diez.
El movimiento regional
La mínima reducción de la economía laboral informal se concentró en los grandes aglomerados urbanos, dado que en los del interior del país, esto es excluido el área del Gran Buenos Aires, la participación de los asalariados en negro se amplió en el último trimestre de 2016 en tres décimas de punto porcentual, a 34,2% del total de los asalariados que representaron casi 3 de cada 4 trabajadores.
El mayor progreso en la baja de informalidad se registró en el noreste, con 2,8 puntos porcentuales, a 32,4% de los asalariados
El aumento de la informalidad laboral se concentró en las regiones Pampeana un punto porcentual, a 34,3%; el Noroeste 0,5 pp, a 40,8%; y Cuyo 0,2 pp a 36,9%; mientras que disminuyó 0,6 pp en GBA a 33,2%; 2,8 pp en el Noreste, a 32,4% y en el área Patagónica 0,6 pp, a 16,9 puntos porcentuales.