El Departamento de Agricultura de los EEUU suspendió por 60 días la regla que permitía importar limones argentinos. Así lo indicó a través de un comunicado difundido por el Servicio de Inspección de la Sanidad Animal y Vegetal del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (APHIS/USDA).
La apertura de este importante mercado para la Argentina, principal productor mundial del cítrico, había llevado meses de negociaciones entre el gobierno argentino y la administración de Barack Obama. Aquel destino comercial estaba cerrado desde septiembre de 2001.
"El Servicio de Inspección de la Sanidad Animal y Vegetal del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos, conforme a la dirección de la Casa Blanca del 20 de enero de 2017, publicó una suspensión (stay) por 60 días sobre su regla final para permitir la importación de fruta fresca de limón del noroeste de Argentina a los Estados Unidos continentales, que fuera publicada el 23 de diciembre de 2016", indicó la autoridad sanitaria de los EEUU.
"Esta suspensión será enviada al Registro Federal el 23 de enero de 2017", agregó el APHIS.
Fuentes del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) argentino indicaron a Infobae que "oficialmente lo que se está haciendo por parte del gobierno de EEUU es una revisión de los acuerdos firmados por el gobierno de Barack Obama en los últimos meses, pero no es una medida en contra de la Argentina ni exclusiva, sino que abarca a todos los países y productos involucrados en recientes convenios de carácter similar".
El comunicado del Departamento de Agricultura de los EEUU (USDA)
El pasado 21 de diciembre, el Departamento de Agricultura norteamericano había anunciado la publicación en el Registro Federal estadounidense de la norma final de autorización de las importaciones de limones del noroeste de Argentina hacia ese país. Dicha autorización se publicó el 23 de diciembre de 2016 y estableció un lapso de 30 días para entrar en vigencia, fecha que se cumplía este 23 de enero, aunque no se hizo efectiva por la revisión de la administración Trump.
Hace un mes, el presidente Mauricio Macri sostuvo que la decisión del Gobierno de los Estados Unidos de autorizar la importación de limones procedentes de la Argentina fue una demostración de "la seriedad y la confianza que podemos generar" como país.
La demanda norteamericana garantizaba un “piso” exportable de 27.500 toneladas anuales
Pero el cambio de rumbo político en los EEUU, con la asunción del republicano Donald Trump y sus anunciadas políticas proteccionistas, pusieron en duda la puesta en práctica de esta autorización para los limones nacionales.
La medida es perjudicial para las economías regionales del Noroeste argentino, en particular de Tucumán. El gobernador Juan Manzur había calificado al vía libre estadounidense como un hecho "histórico " y un "hito que marca un antes y un después con lo que tiene que ver con el trabajo, la producción y el bienestar de los tucumanos, que emplea a más de 50.000 personas de manera directa y en mano de obra intensiva".
"Soy testigo y me consta que Macri habló con el presidente Barack Obama y uno de los puntos centrales que le pidió fue el tema del limón", expresó entonces el gobernador tucumano.
Según datos de la Federación Argentina del Citrus (Federcitrus), la apertura del mercado norteamericano para la producción de limón fresco local significaba ventas anuales por USD 50 millones "como piso", con un volumen de 15.000 a 20.000 pallets, lo cual representaría envíos por más de 27.500 toneladas.
ARGENTINA, LÍDER DEL MERCADO GLOBAL
Un estudio de la Fundación Mediterránea destacó la competitividad que tiene la cadena productiva del limón en la Argentina. Según el informe, el complejo citrícola del limón es el que mayor inserción internacional presenta en comparación con otras cadenas agroalimentarias.
Las exportaciones de los tres principales productos de la actividad limonera (fresco, aceite y jugo) "capturaron casi el 15% de las exportaciones mundiales para el promedio del período 2010/14″, según el informe. En el caso del aceite de limón, la participación argentina de mercado global todavía es superior: 40 por ciento.
Un informe de Fedecitrus indicó que en el último año el 95% de los limones cosechados tuvo como destino la exportación por un valor de USD 600 millones y una industrialización del 70 por ciento. Los principales subproductos argentinos correspondieron al jugo, aceite y ralladura disecada, mientras que un 30% de los embarques fueron mercancías sin procesar. En tanto, el 5% restante de la producción se destinó al mercado interno, que consume unas 40.000 toneladas al año.
Los principales destinos comerciales de la producción limonera argentina fueron la Unión Europea y Rusia, que concentraron las dos terceras partes de los envíos, aunque la Argentina apuesta a abrir nuevos mercados en el corto plazo, como la India y China, además de los EEUU.