El mercado de trabajo sigue sin generar buenas noticias para el conjunto de las familias que residen en el país, porque ya avanzada la primavera, los esperados "brotes verdes" no logran superar los brotes que se demoran en aparecer, en particular en el área de los productores de bienes.
El relevamiento mensual de la consultora Tendencias Económicas y Financieras arrojó para el último mes un nuevo impulso de los despidos en todo el país, a 5.370 personas, luego de una apreciable baja el mes anterior. Significó un incremento de casi 63% anual.
"Se localizaron principalmente en la actividad de la construcción, seguida por la productora de frutas del Alto Valle de Río Negro y en la industria manufacturera, en la rama metalúrgica y en menor medida en textiles, plástica, neumáticos, curtiembres y tabaco, entre otras, o fuera de la industria en el comercio, el transporte, supermercados o la exportación de frutas", sintetiza el estudio que dirige el economista José Luis Blanco.
La única buena noticia, en términos relativos, fue que pese a semejante salto de las desvinculaciones de personal que denunciaron los sindicatos y publicitaron en medios gráficos (rara vez informan cuántas fueron las incorporaciones en el período), el nivel de cesantías se achicó sensiblemente en comparación con los despidos en el primeros cinco meses del año.
Los productores de bienes fueron los que más volvieron a reducir la nómina de personal
Además, el nivel de desvinculaciones si bien afectó a 2.000 personas más que en igual mes del año anterior, se redujo en 1.200 casos en comparación con similar mes de 2014 cuando el Gobierno anterior dispuso una fuerte devaluación sin un plan de estabilización de precios por delante.
EXPECTATIVAS DE REACTIVACIÓN
El estudio privado también midió las denuncias de suspensiones de personal. "Afectaron a 19.766 trabajadores, nivel que arroja un aumento del 24,7% anual. Las ramas industriales que aplicaron este mecanismo fueron la automotriz, textiles, metalúrgica, petróleo, electrodomésticos y alimentos".
Para el Gobierno, la alta relación entre el recorte parcial de la jornada laboral, con pago de salarios disminuidos, y el nivel de despidos, significa que "los empresarios esperan un repunte de la actividad, y por tanto hacen esfuerzos por no achicar la nómina de modo definitivo".
En los primeros 10 meses se anotaron poco más de 177.000 cesantías de personal, se multiplicó por siete en comparación con el año anterior
Para eso se apoyan en la aceleración que en los últimos meses tuvieron los anuncios de inversiones productivas y de servicios, porque en la medida en comiencen a madurar generarán empleos directos para más de 30.000 personas, y en que la desaceleración de la tasa de inflación, más allá del repunte puntual de octubre por el reajuste del cuadro tarifario del gas; la baja de las tasas de interés; y la virtual estabilidad del tipo de cambio, contribuirán a reanimar a las pymes y con ello la creación de empleos netos.
Hasta ahora, para la Tendencias, "en los primeros 10 meses de 2016 los despidos se incrementaron en más de 6 veces en comparación con un año atrás, al ascender a poco más de 177.000 personas, sobresaliendo los de la actividad de la construcción, seguidos por los de la metalurgia, textil, petróleo, comercio y gastronómicos. Las suspensiones crecieron 150% anual, debido a que varias ramas industriales aplicaron este mecanismo para reducir adicionalmente la producción y ajustar los stocks".