Fue la adrenalina del momento, estaba con las pulsaciones a mil o no quise ofender a nadie son algunas de las respuestas que Ángel Di María podría estar ensayando por estas horas, cuando el Barcelona se lanzó a la concreción de su fichaje, acaso dejando de lado aquel famoso gesto de marzo pasado durante el histórico 6-1 que sufrió con el PSG en el Camp Nou en octavos de final de la Champions League.
Todo ocurrió el pasado 8 de marzo, cuando el equipo francés, que había ganado por 4-0 en la ida, desaprovechó de manera increíble la oportunidad de pasar de ronda en la máxima competencia de clubes al caer por 6-1 en la vuelta y el rosarino terminó siendo objeto de varios memes tras el gesto con el que mandó a callar a los hinchas del Barça en la celebración del gol de Edinson Cavani en el estadio blaugrana que entonces parecía ser el de la clasificación a cuartos sólo que luego el local, que ya había hecho tres tantos, marcó otros tres y ganó la llave.
Ahora, claro, todo parece lejano y hasta olvidado, al menos para la cuestionada dirigencia del club catalán. Los hinchas, sin embargo, no olvidan aquella transgresión de Fideo.
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