Matías Delgado no pudo contener las lágrimas en la conferencia en la que anunció su retiro del fútbol. En la sala de prensa del Basel de Suiza, el hoy ex jugador rompió en llanto ante el cántico con su nombre que le dedicó un grupo de fanáticos del equipo. Horas más tarde, el hincha más famoso del club de Basilea, Roger Federer, rindió su propio homenaje al argentino: lo saludó y le agradeció a través de las redes sociales.
"Hizo que el mundo sepa que hay un jugador argentino que se retiró en Suiza", dijo Delgado a Infobae en diálogo desde Suiza, aún incrédulo del fenómeno que se generó a partir del mensaje del legendario tenista.
La decisión de dejar la actividad profesional requirió de un largo y difícil proceso para el rosarino. Según sus propias palabras, fue una lucha contra sí mismo. "Tenía que estar al 100% físicamente y estable de la cabeza para rendir al máximo, pero hace un par de meses venía pensando que se me estaban acabando las energías, más mentales que físicas. El cambio de entrenador me motivó para volver de las vacaciones y para empezar la pretemporada, pero la verdad es que estaba cansado", contó.
Aquel futbolista que se fue de Chacarita en el 2003 para recalar en el Basel, encontró en Suiza una tierra fértil para desarrollarse como jugador y como persona. El temple y el sacrificio que demostró en sus dos ciclos en el club (2003-2006 y 2013-2017) lo transformaron en un referente y en un ídolo. La cinta de capitán fue el premio a esa entrega y los títulos, el resultado del trabajo.
Federer fue el invitado especial durante los festejos por la consagración del Basel en la edición 2016-2017 de la Superliga suiza. En el vestuario, Delgado le regaló su camiseta, pero con la condición de que Roger le devolviera la gentileza. "Ahora tenés un compromiso, me tenés que regalar algo tuyo", le dijo.
"Dangge", escribió el tenista en Twitter días atrás, junto a una serie de imágenes de Delgado con la camiseta del equipo suizo. La palabra quiere decir "Gracias" en el dialecto de Basilea. El argentino, que no tiene cuentas en redes sociales, se enteró del mensaje cuando sus hermanos lo llamaron para avisarle. "Ese fue el regalo que me debía", sostuvo orgulloso el rosarino, quien consideró la deuda saldada. Tal vez, en un futuro, reciba una raqueta o una camiseta de parte de Roger.
Dangge
https://t.co/3Hpf63UJ0q— Roger Federer (@rogerfederer) July 30, 2017
Pero ese encuentro durante la celebración por la consagración del Basel no fue la primera vez que Delgado tuvo la oportunidad de charlar con el ocho veces campeón de Wimbledon. "Viene a ver partidos nuestros. Es muy hincha. Tiene una humildad increíble. Sabe todo, te habla hasta del partido de Copa ante un equipo de la cuarta división que no ve nadie", señaló el argentino, quien desde un primer momento se impresionó con la simpleza de Roger: "Te sorprende y te incomoda, no sabés cómo reaccionar. Te saluda él a vos con cierta vergüenza en el vestuario. Le tenés que decir 'Pasá, Roger'. Nosotros estamos todos alucinados y él tal vez piensa que molesta. Es un gran ejemplo".
Para el ex mediocampista, Federer es una suerte de referente para todo el plantel del Basel ya que "sin querer, enseña un montón de cosas". Además, reveló que "hizo muchas cosas que la gente no sabe" por el equipo y por el club.
Dentro de la multitud de fanáticos apasionados del Basel, el actual número tres del ranking ATP es el más ilustre. El estadio se llena cada vez que juega el equipo y Delgado es el gran símbolo. Sin embargo, fuera de la cancha es un ciudadano más. "Es todo lo contrario a la Argentina. Yo hago una vida totalmente normal, como si no fuera jugador. Hay un respeto increíble de todo el mundo. Todos te conocen, pero nadie te viene a molestar. Respetan el espacio del jugador y es muy confortable. En la cancha es impresionante el ambiente, pero termina el partido, salís caminando y se terminó el show, sos un ser humano más", destacó.
Convertirse en referente no fue fácil. Acostumbrarse a vivir como una estrella en un fútbol híper-profesional implicó un cambio en la mentalidad del argentino. "Dejaba Chacarita para irme a Europa, a una ciudad hermosa, moderna, a un gran estadio, a tener ropa de marca, un sponsor…Todas cosas que no me habían pasado nunca en la vida", recordó.
En el plano futbolístico, los primeros tiempos no resultaron de acuerdo a lo esperado para Delgado. Dos jugadores argentinos, Christian Giménez y Julio Rossi, le dieron el apoyo necesario para revertir aquellos malos momentos y para construir una carrera plagada de éxitos.
"Esta última etapa me agarró más maduro, entendiendo todo. Te vas haciendo grande y como capitán te enterás de las cosas del club y te consultan. Cuando sos joven, ni te pasan por al lado esas cosas. Crecés, te aferrás más al equipo, a la sociedad y te querés quedar más. Estos cuatro años fueron inolvidables. Viví el fútbol con una maduración fuerte: de joven no, pero hoy cada partido era el último y fue mucho más lindo. Disfruté mucho más", señaló, emocionado, respecto del ciclo que acaba de terminar.
Delgado aún no sabe qué le deparará el futuro. A los 34 años, planea hacer el curso para conseguir la licencia de entrenador y, aunque le gusta mucho el trabajo con juveniles porque "tienen la cabeza limpia", no tiene decidido si ese será su próximo paso.
Por el momento, disfruta del ascenso a Primera División de Chacarita Juniors (club del cual hizo hincha a su hijo mayor de 11 años – las nenas de 9 y 4 años son del Basel-) y se ilusiona con un mejor panorama para el fútbol argentino. Su experiencia de 14 años en el exterior (pasó también por el Besiktas de Turquía y el Al Jazira de Emiratos Árabes) le permite tener una perspectiva personal respecto de la organización del fútbol nacional y del día a día del deporte que apasiona a millones.
"Es triste ver las cosas que pasan, las decisiones que se toman. Me pongo en la piel de los jugadores y no está bueno. Tendría que ser todo perfecto y no lo es. Me pone triste y me da bronca que los futbolistas tengan que vivir así. Escuchar a Maxi Rodríguez decir que se va del club que ama (Newell's) por su salud mental…Se pasa el límite, no se respeta. Espero que todo eso un día cambie", concluyó.
LEA MÁS:
El mundo del deporte le rinde tributo a Roger Federer
El emotivo llanto de Roger Federer tras consagrarse campeón de Wimbledon
Todos los números del ascenso de Chacarita a Primera División