El brasileño Neymar es una figura consagrada del fútbol mundial. Cuesta imaginárselo como una persona tímida e insegura. Sin embargo, sus comienzos en el Barcelona tuvieron algo de esa fragilidad propia de un joven que llega a uno de los equipos más poderosos de la Tierra.
"No digo que fuera difícil adaptarme al vestuario del Barça cuando llegué, pero el primer mes fue complicado", reveló el brasileño respecto de su arribo al conjunto catalán, que se produjo a mediados del 2013, cuando solo tenía 21 años.
En diálogo con un programa de la televisión brasileña llamado "Caldeirao do Huck", Neymar se refirió a aquellos primeros contactos con los experimentados jugadores del elenco "Blaugrana".
"Era una situación exquisita porque cuando entrada y miraba hacia un lado ahí estaba Messi y en el otro Xavi o Iniesta o Piqué. Parecía que estaba en un videojuego: justo había jugado con ellos y de pronto los tenía a mi lado. Al principio me daba vergüenza de hablar con ellos. Son ídolos, son mis ídolos. Y yo era el recién llegado y muy joven", comentó.
Durante la misma emisión, el brasileño, surgido del Santos, confesó que algún día le gustaría jugar en el Flamengo por "la pasión y la fidelidad de los aficionados", y habló sobre el costo que se paga por ser famoso. "Te aparecen amigos y supuestos primos de abajo de las piedras", lamentó.
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