"Estoy en una encrucijada, un partido me pone en el lugar más incomodo del mundo", apuntó Pablo Lavallén, técnico de Atlético Tucumán, antes de enfrentar mañana a River, club del que es hincha, en un partido que será determinante para la definición del campeonato y que, de ganar el Decano, podría darle a Boca el envió que necesita para ser campeón.
El técnico reconoció que no será un día más el de mañana. "Yo me formé en River, tengo mi corazón en River y no quiero que sea campeón Boca, pero soy profesional", remarcó y agregó: "Durante mi formación en River me transmitieron el espíritu de jugar con honestidad, tratando de hacer lo que corresponde y no lo que conviene, y lo que corresponde es que yo hoy defienda los intereses de Atlético Tucumán, que es el club que me da trabajo y me permite construir una carrera en la dirección técnica".
Lavallén, de 44 años, debutó en Primera con la camiseta del Millonario en 1991 y se mantuvo en el club hasta 1996. Fue campeón en tres torneos locales y se consagró en la Copa Libertadores '96 cuya final de ida disputó por algunos minutos. Tras recibirse como director técnico estuvo al frente de las categorías séptima y octava del club de Núñez, con notable desempeño, tanto que recibió una oferta de San Martín de San Juan para dirigir en Primera y allí comenzó, para luego pasar a Atlético Tucumán, equipo con el que llegó incluso a disputar la vigente Copa Libertadores (fue eliminado en primera ronda).
Su paso por River como jugador y técnico, más los resultados obtenidos como entrenador en San Juan y Tucumán y la filosofía de sus equipos, emparentados con el estilo del Millonario, le han permitido estar siempre en una lista de futuros entrenadores, siendo incluso uno de los nombres que se perfilan a reemplazar a Marcelo Gallardo cuando finalice su ciclo.
Claro que el partido de mañana será un antecedente importante para la su futuro respecto de las sensibilidades teniendo en cuenta que si Atlético Tucumán vence a River, allanará mucho del camino de Boca al título. "Muchos comentan o me hacen llegar que del partido de mañana dependerá que pueda tener una oportunidad como técnico pero no sé con qué sentido dicen lo que dicen… No me gustaría. si yo fuese dirigente de un club. tener un entrenador que en algún momento de su carrera fue para atrás entregándole los puntos a un rival", sentenció.
Amenazas en las redes
En el contexto del partido postergado de la fecha 22 del Campeonato de Primera, que se jugará en Tucumán desde las 20:15, Pablo Lavallén reveló que recibió amenazas en su cuenta de Twitter. "Mandaron cosas que primero me preocuparon como que saben donde vivo, adonde van mis hijos, pero al poco tiempo los borraron y entendí que muchas personas se esconden detrás de una red social, que no ponen nombre, ni foto, ni nada y ponen cualquier cosa".
Al respecto el entrenador añadió: "Me decían lacra, mercenario, son cosas que uno intenta minimizar pero a su vez sabiendo que hace dos meses tiraron a una persona de la tribuna y hay mucho enfermo suelto, no está bueno".
La polémica
Lavallén también explicó su decisión de poner ante Talleres, en la fecha pasada, mayoría de suplentes y guardar a sus mejores hombres para recibir a River.
"Tengo futbolistas titulares que se infiltran para poder jugar, El Pulga (Luis Miguel Rodríguez) arrastra una contractura, otros tienen molestias y y porque en 20 días tenemos que jugar seis partidos y me pareció que después de venir de un viaje (ndr: el pasado miércoles enfrentaron en Brasil al Palmeiras) me parecía arriesgado".
Cabe mencionar que el entrenador decidió que siete futbolistas del plantel profesional se quedaran en Tucumán en lugar de viajar a Córdoba para enfrentar a Talleres y tenerlos disponibles para jugar con River. Ellos son: Cristian Lucchetti, Ignacio Canuto, Fernando Evangelista, Rodrigo Aliendro, Nery Leyes, David Barbona, Leandro González y Luis Rodríguez.