Después del triunfo de San Lorenzo en Parque Patricios, los equipos de Reserva se vieron las caras en la Quemita y nuevamente festejaron los de Boedo. Con dos goles de Germán Berterame, los dirigidos por Claudio Biaggio se impusieron 2-0 en un encuentro que tuvo tres expulsiones en el cuadro local.
Después del pitazo final y en medio de un clima caliente, hubo cánticos e insultos. Uno de los jugadores del Globo se enfureció cuando los rivales amagaron con cantar "hijos nuestros" y les tiró un pelotazo. Después, otro miembro del conjunto anfitrión se la agarró con el árbitro.
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