El Masters 1000 de Roma tiene depositada toda su esperanza en un único argentino: Juan Martín Del Potro. Los otros dos compatriotas que conformaban la delegación presente en uno de los torneos más importantes en polvo de ladrillo perdieron sus enfrentamientos.
Tanto Diego Schwartzman como Carlos Berlocq fueron eliminados en los cruces que tuvieron hoy por el campeonato pero no pudieron superar los escollos.
El Peque cayó 6-4, 1-6 y 7-5 ante el estadounidense Jack Sock en más de dos horas de juego. El tenista de 24 años, que es el segundo mejor argentino en el ranking ATP (39°), venía de superar al checo Jiri Vesely.
El presente de Charly era distinto y su presencia en esta instancia ya era un mérito. Alcanzó esta instancia desde la qualy, superó al holandés Robin Haasel pero no pudo contra el checo Tomas Berdych. Perdió por 6-3 y 6-4. El hombre de Chascomús ocupa el puesto 68 del ranking a sus 34 años.
La expectativa ahora se centrará en Delpo, que mañana chocará en el primer turno contra el británico Kyle Edmund con la idea de acceder a octavos de final. Del otro lado de la llave llegará el triunfador del choque entre el japonés Kei Nishikori y el español David Ferrer.
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