El Libertadores de América volvió a ser testigo de la constante ineficacia que persigue a Independiente de un tiempo a esta parte. El elenco de Avellaneda igualó 1-1 con Vélez luego de fallar una buena serie de ocasiones claras de gol.
La dificultad para marcar goles en el Rojo se quebró por un breve lapso gracias a un gol "imposible" de Emiliano Rigoni. En el primer cuarto de hora del partido, el ex Belgrano tomó un tiro libre desde un ángulo muy difícil pegado a la línea de meta rival. Sacó un potente derechazo que superó a Fabián Assman por arriba y se metió en el ángulo.
El elenco de Ariel Holan dominaba el juego y merecía mejor suerte, aunque profundizó el déficit a la hora de la definición. La tuvo Juan Sánchez Miño con un remate potente desde afuera y también avisó Lucas Albertengo con un tiro que Assman sacó al córner.
Sin embargo las miradas finales quedaron para los del Fortín: Nicolás Figal chocó a Mariano Pavone en el vértice del área y todos pidieron penal, pero Nicolás Lamolina no lo cobró.
La segunda etapa se inició con la mala fortuna como testigo para los de Holan: una serie de rebotes le dejó el gol servido al Burrito Martínez, tras una buena atajada previa de Martín Campaña a un disparo de Diego Zabala.
Los de De Felippe comenzaron a crecer en el partido, pero así y todo las más claras estuvieron de la otra verada. Como la que falló Emmanuel Gigliotti a los 15 minutos tras una buena cesión de Rigoni, errándole a la pelota abajo del arco cuando parecía que gritaría su primer tanto para el Rojo.
Independiente suma 24 puntos con este resultado, teniendo en cuenta que todavía debe dos partidos contra Talleres de Córdoba y Defensa y Justicia. Su rival de turno, por tanto, tiene 19 unidades y sigue cosechando para escapar del descenso.
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