Mientras en Argentina se debate qué hacer con el ciclo de Edgardo Bauza, en Brasil están celebrando que de la mano de Tite se logró la clasificación al Mundial de Rusia 2018. La Albiceleste cayó al puesto de repechaje con la derrota ante Bolivia y el Patón volvió a estar en el ojo de la tormenta. El DT brasileño cumplió con el objetivo cuando reemplazó a Dunga.
Aunque asumieron con apenas días de diferencia, debutaron en la fecha 7, las decisiones previas en relación al equipo fueron determinantes. Mientras Bauza respetó al plantel heredado, Tite optó por una "limpieza" en las convocatorias que le dio sus frutos.
El 20 de junio de 2016, Tite fue anunciado como nuevo entrenador de la Verdeamarelha. "Hay riesgo de no ir al Mundial. Efectivamente, me preocupa el sexto puesto en la clasificación", fue el primer anuncio del ex DT de Corinthians. Brasil venía de quedar eliminado en la primera ronda de la Copa América Centenario y rápidamente decidió enfocarse en la mayor, optando por la continuidad de Micale al frente del conjunto que los represente en los Juegos Olímpicos de su país.
La primera medida interna que tomó fue una fuerte renovación en el plantel. Dejó de lado futbolistas que llevaban años sin poder conectarse con el público y convocó a ex jugadores dirigidos por él que habían sido relegados de la selección. Así se le abrió la puerta a varios campeones olímpicos. Se sumó Paulinho, quien no era convocado desde el Mundial, Rodrigo Caio, Marquinhos, Renato Augusto y Gabriel Jesús, quien con 19 años no le pesó la camiseta de Ronaldo.
Y apartó a históricos como David Luiz y Thiago Silva, además de cambiar el esquema táctico para realzar la figura de Neymar, logró equilibrio con Casemiro y respaldó sólo a Marcelo y Dani Alves. De esta manera, pasó de un promedio de edad de 29,6 a 26.
El 5 de agosto de 2016 Edgardo Bauza asumió en Argentina, en reemplazo de Tata Martino. Tras una breve experiencia en San Pablo, Patón fue el elegido de la por entonces Junta Interventora que manejaba la AFA. Y en sus primeras palabras ya se percibía lo opuesto al DT de Brasil: "Desde que me llamaron, pienso en ser campeón del mundo. Estoy seguro que vamos a ser campeones. Vamos a respetar a los jugadores que vienen siendo convocados".
La primera acción importante fue viajar a Barcelona y reunirse con Lionel Messi para lograr su retorno, tras el anuncio del futbolista de no jugar más con la Selección. Y la principal diferencia que, salvo raras excepciones con convocatorias esporádicas de futbolistas del ámbito local, mantuvo la base de jugadores que venían siendo convocados por Martino y Sabella.
¿El resultado? Tras sus debuts en la fecha 7, Argentina que se encontraba 3° con 11 puntos, sacó el 45.8% de los puntos (11 sobre 24). Ganó tres, empató 2 y perdió los restantes. Además, en condición de visitante sólo logró dos empates: Venezuela y Perú. Así fue como cayó a la zona de repechaje con 22 puntos, 15 goles a favor y + 1 de diferencia.
Brasil, que estaba afuera de la clasificación, ganó los ocho partidos disputados con Tite al frente del equipo. Sumó 24 puntos, con 35 goles a favor (+25 de diferencia) y apenas dos goles en contra (uno fue ante Colombia por el gol en contra de Marquinhos y el otro frente a Uruguay). Actualmente, lidera la tabla de las Eliminatorias con 33 puntos y ya sacó el boleto al próximo Mundial.
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