Paz en la AFA: Queen y Los Chalchaleros, en el mismo escenario

No daba para más. Desde que comenzó el año, se habían llevado a cabo 21 reuniones entre dirigentes de la AFA. Ya sea entre sí o con enviados de la FIFA, de la Conmbeol , de las empresas audiovisules o del Gobierno. Cada mitin promedió las dos horas y media. O sea más de dos dias -48 horas y 30 minutos– de debates, discusiones, acuerdos y expectativas. De ellas 11 fueron en la propia AFA y 10 en otros lugares.

La FIFA, por su parte se había expedido el 1 de marzo bajo el siguiente sentido interpretativo: "Muchachos, todo bien, pero avancen, cumplan con lo aprobado, hagan las elecciones en la fecha prevista, terminemos con el caso Argentina, no nos obliguen a sancionar…".

Todo fue dinámico y cambiante. Del no al sí, apenas minutos. Del sí al no, nada, segundos. ¿Qué se procuraba? Del lado de Chiqui Tapia que las elecciones fueran el 29 de marzo de 2017. Evitar que prosperara cualquier chicana que prolongara la agonía institucional.

De la otra parte, la de Marcelo Tinelli y Rodolfo D'Onofrio, apoyados por Raúl Gamez, pedían que se fijara una nueva asamblea para reescribir y aprobar el articulo 87 del nuevo Estatuto. Y así sólo aceptar a la Conmebol como único tribunal para evaluar la idoneidad del candidato. Recuérdese que la ultima Asamblea había designado al Tribunal de Ética del Colegio Público de Abogados de la Capital Federal para que evaluara la idoneidad del candidato. No desistirá de ello, pero aceptó someter a Claudio Tapia al Comité de Ética y Cumplimiento de la Conmebol.

Respecto de esto, los miembros de la Junta Interventora también manifestaron posiciones dinámicamente cambiantes. Armando Pérez, quería una nueva Asamblea. Luego que no, que las elecciones serían el 29 de marzo. Luego "haremos todo lo mas legal posible". Carolina Cristinziano se mantuvo siempre distante. Javier Medín esperó instrucciones y finalmente apoyó para que se cumpla el organigrama. Pablo Toviggino obviamente a favor del no innovar. Y al final, todos convergieron en una misma posición, la que bajó el Gobierno.

Para Marcos Peña –Ministro Jefe del Gabinete de Ministros- y Fernando De Andreis –Secretario General de la Presidencia- el tema AFA debía terminarse por el mejor camino, el de la concordancia. Y se lo hicieron saber a Daniel Angelici: quieren una foto todos juntos, sin exclusiones y con distribución de cargos y responsabilidades.

La lista que Chiqui Tapia había presentado el 8 de marzo, a las 19:41 hs (con una avasallante adhesión de 36 firmas sobre 43 sufragantes), resultaría inamovible, según el nuevo estatuto. No obstante, había que incluir a Tinelli y D'Onofrio en la nueva AFA. Pero, ¿dónde?, ¿en que áreas?

La reunión que se llevaba a cabo el jueves 9 de marzo por la tarde fue interrumpida. Daniel Angelici, quien al comienzo del reclamo de Tinelli había pedido más tiempo, ahora, tras un llamado telefónico, tenía la obligación de resolver esta cuestión lo antes posible y de la manera más armoniosa que cupiera. Para Angelici, en pos de evitar protestas tuiteras posteriores, no hubiera estado mal postergar las elecciones. Claramente, no le temía a una confrontación electoral con D'Onofrio y Tinelli. Tampoco los demás miembros de la lista de Tapia. El problema era que se atrasaba también la firma del contrato con la empresa que se adjudicare los derechos de comercialización audiovisual. El nuevo socio de la AFA aspirará cuanto menos a firmar con las autoridades legítimamente constituidas por el voto de la asamblea.

Esa firma significará el cobro de 1.200 millones de pesos en concepto de llave. Y esa llave permitirá seguir la cadena de pagos a los clubes que ya reiniciaron los diferentes torneos. El deseo del Gobierno más el cobro de ese importantísimo dinero, facilitaron la nueva y urgente gestión de Angelici.

Acompañado por Chiqui Tapia, inminente presidente de la AFA, Victor Blanco (Racing), Hugo Moyano y Carlos Montagna (Independiente), Pablo Toviggino (futuro Director General de la AFA), Nicolas Russo (Lanús) y Marcelo Achille (Defensores de Belgrano), el presidente de Boca marchó hacia la torre Le Parc de Figueroa Alcorta y Cavia. Allí estaban su anfitrión, Marcelo Tinelli y el presidente de River, Rodolfo D'Onofrio. La reunión fue dura, confrontativa, sincera y descarnada. Pero, como suele ocurrir en estos casos, positiva.

Se dijeron todo cuanto debían decirse. El intercambio de "facturas" resultó saludable. Algunas cosas quedaron más claras que otras. Tapia le recordó a D'Onofrio que había sido invitado a formar parte del espacio y que su respuesta fue: "A mí dejame en la FIFA". También se aclaró que San Lorenzo tenía lugar en el Comité Ejecutivo y que Marcelo, en particular, siempre se había expresado a favor de gestionar y desarrollar la Superliga.

Pero estos cruces, a esa altura, ya carecían de sentido. La recomendación superior era arreglar, hacer una AFA con todos adentro.

Tinelli defendió con dignidad, como se debe hacer, a su "tropa". Se opuso a la designación de Alejandro Nadur (Huracán) como Tesorero. Era demasiado tarde. Quería además que se incorporaran Raúl Gamez (Vélez Sarsfield), Roberto Fernández (ex presidente del Consejo Federal del Futbol) y Mario Leito (Atlético de Tucumán). También era demasiado tarde.

No fue en cambio tan enfático con quienes lo habían apoyado siempre y ahora integran la lista de Tapia. No se detuvo en los casos de Nicolas Russo (Lanús), Daniel Degano (Los Andes), Pipo Marín (Acassuso), Marcelo Martin (Union), Adrian Zaffaroni (J.J. Urquiza), Nicolas Caiella y Juan Sebastián Verón (Estudiantes de La Plata). Entender la política no es aún el fuerte de Tinelli. Quienes aceptaron no lo abandonaron; era lista única. Significaba estar o no estar dentro del Comité Ejecutivo.

La síntesis de esa reunión en la casa de Marcelo Tinelli fue que tanto Rodolfo D'Onofrio como él, estarán –si aceptan, cosa que oficialmente se sabrá mañana- en la estructura vital de la nueva AFA. Para ambos la responsabilidad de la futura Superliga. Tinelli como figura principal y D'Onofrio como el vice. A su vez, Marcelo será el presidente de la Comisión de Selecciones Nacionales. Y D'Onofrio continuará como representante de la AFA en FIFA en la Comisión de Grupos de Interés que se ocupa de tratar aspectos técnicos del juego.

Los jugadores de la Selección Nacional adoran a Tinelli. Están unidos por la mutua admiración y ese plus afectuoso y personal que derriba límites e inhibiciones convivenciales. Y con Edgardo Bauza como Director Técnico Jefe, el advenimiento de Tinelli será muy bien recibido por el plantel seleccionado. También respetan y quieren al presidente Chiqui Tapia, quien siempre y más aún en las malas, estuvo junto a ellos de manera solitaria e irrestricta. O sea que la primera lectura es bendiciones para Ezeiza y los seleccionados argentinos.

El caso de la Superliga, requerirá de más tiempo para diagnosticar. ¿Debería ser inmediata? ¿Convendrá su facticidad o esperar una mayor decantación de equipos? Si el negocio de la televisión se cerrara y los valores quedaran establecidos, ¿Cuál sería el apuro…?.

Todo hace presumir que la AFA marcha hacia su normalización. El fracaso de la Junta Interventora obligó a que el Gobierno volviera a ocuparse de un tema que siempre tuvo en agenda. Resueltos los casos de Futbol para Todos, Superliga, reformulación del Estatuto, huelga de los jugadores y relación con la FIFA, faltaba solucionar un último punto. Importantísimo. Y es la relación entre el Futbol Argentino y la Conmebol.

El presidente Mauricio Macri fue quien intervino para que este aspecto se reencauzara. Para ello invitó a Alejandro Domínguez, presidente de la Conmebol a la residencia presidencial de Olivos. Y también citó a su amigo Daniel Angelici, presidente de Boca Juniors.

La reunión se llevó a cabo el viernes cerca de las 8 de la mañana. El presidente, que lucía zapatos mocasines marrones, un pantalón de tenue color caqui, camisa de fuerte tono azul y blazer italiano, los invitó a poner en claro los aspectos que los incomunican.

El caso Boca llevó la mayor parte del tiempo. Angelici reclamó un trato justo para su club. Y que su idea sobre la formación de una nueva liga sudamericana, no incida subjetivamente en el futuro sobre las cuestiones arbitrales e institucionales. Reclamó que Boca no tuvo "derecho a defensa" en el episodio "gas pimienta". Y aunque no era el presidente de la Conmebol, pues lo era Juan Angel Napout, ahora detenido por corrupción, hay expedientes y reclamos actuales de Boca "pisados". Por ejemplo, un reclamo a Atlético Mineiro por deuda.

Respecto de la AFA, el dialogo fue más cordial. Entendió Alejandro Domínguez que se está refundando la AFA, tal como le pasó a él con la Conmebol. Y que hay que facilitar ese proceso bajo el imperio de la ley, pero con el acompañamiento de la solidaridad y el sentido común.

La reunión en Olivos con Macri duró 22 minutos pues el presidente debía trasladarse al Partido de San Nicolás para clausurar la Expoagro. Angelici y Domínguez, ya cerca de las 9:30 se dieron la mano. ¿Asunto superado?

Van quedando pocas cosas pendientes. Para mañana está previsto dar a conocer el nombre de la empresa o empresas que habrán de adjudicarse los derechos audiovisuales por los próximos cinco años.

El Certificado de Reincidencias de Claudio Tapia, lo que se conoce como Antecedentes Penales junto con el de Antecedentes Comerciales, ya están en Asunción. Fueron enviados por el doctor Andres Paton Urich. En esos documentos los antecedentes de Tapia son impecables. Y sólo lo oficial, es lo que se considera al momento de resolver. Es por esto que la denuncia mediática de la Legisladora Graciela Ocaña en contra de Tapia, no será evaluada por el Comité de Ética y Cumplimiento de la Conmebol a cargo de la Licenciada Graciela Garay. El próximo viernes, la Conmebol informará sobre la aceptación de "Idoneidad" de Claudio Tapia para ser Presidente de la AFA.

La historia comenzó con los Queen en un escenario y Los Chalchaleros en otro. No están unidos por la afinidad. Ambos grupos han hecho un enorme esfuerzo de alteridad por aceptarse. Es por ahora una relación débil. Sujetada por un débil hilo. Un pedido del Gobierno al que ambos grupos accedieron. Y aunque aun no comenzó el concierto seria alentador que Freddie Mercury nos ofreciera una Luna Tucumana y Los Chalchaleros se animaran a un We are the champions. Difícil. Pero… ¿qué cuesta intentarlo?

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