Aunque la verdadera meta era la Champions League (el 4 a 0 en la ida ante Paris Saint Germain los dejó prácticamente fuera de la competencia), los objetivos de Barcelona variaron y pasaron a ser la Copa del Rey y la Liga.
Los dirigidos por Luis Enrique arrancaron bien en el Camp Nou. Javier Mascherano, en su regreso tras un desgarro, asistió a Lionel Messi para quebrar el cero frente al Sporting Gijón. Este de cabeza fue el tanto número 21 del argentino, máximo artillero de la Liga.
Más tarde, un gol en contra de Rodríguez -provocado por Luis Suárez- hizo vislumbrar la goleada. Sin embargo, Carlos Castro descontó y sembró incertidumbre en el local, que volvería a estirar la brecha en el tanteador a través del delantero uruguayo, Paco Alcácer (asistencia de Messi), Neymar (de tiro libre) e Ivan Rakitic.
Con este resultado, los blaugranas superaron la línea de los de Zinedine Zidane por dos unidades, aunque los Merengues juegan a su término y deben otro partido postergado ante el Celta. Cabe destacar que Luis Enrique cuidó a Suárez (salió en el entretiempo) y Messi (a falta de media hora), pensando en los próximos compromisos: la semana que viene irá por la heroica remontada ante el PSG, que ganó 4-0 la ida de Champions.
Los oriundos de Asturias solamente poseen 17 unidades y figuran en zona de descenso.
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