Claudio Vivas abandonó su tarea en Independiente envuelto en una polémica y rápidamente se convirtió en el reemplazante de Jorge Raffo como coordinador de las divisiones juveniles de Boca.
Asumió hace una semana y su primera medida en su nuevo club fue la de pedir una habitación en la pensión de la institución para poder vivir en el lugar durante tres o cuatro días a la semana en pos de forjar un rápido vínculo con los integrantes de las inferiores.
"Me prestaron una habitación para quedarme. Estoy parando acá, conviviendo con los chicos. Metiéndome en el Mundo Boca que no es poca cosa", explicó Vivas en diálogo con el programa Estudio Fútbol que se emite por TyC Sports.
En relación a su nuevo rol, señaló que lo más importante "es el fútbol infantil". "Ahí se comienza a conseguir jugadores para el armado de las estructuras. Ningún club puede sostener una pensión de más de 70 jugadores", justificó.
Recordando los buenos futbolistas que surgieron de las categorías menores del Xeneize a lo largo de la historia, subrayó: "En nuestras inferiores vamos a jugar con volante ofensivo, con un número diez".
"Boca no necesita ningún modelo para imitar. Es grande y necesita tener su propio modelo, que todo el mundo pueda venir a imitar cómo trabajan las juveniles de esta institución", confesó su anhelo.
En el Rojo duró poco menos de seis meses en el cargo y si bien intentó evadir la polémica, reconoció que su salida estuvo vinculada al arribo de Ariel Holan, con quien tuvo una fuerte disputa en Banfield. "Ese tema está cerrado. Estoy muy agradecido de estar acá, pero quizás si Milito fuese el técnico de Independiente no estaría hablando con ustedes con la camiseta de Boca", reconoció.
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