Los problemas económicos en el fútbol argentino hacen tambalear la reanudación del campeonato a comienzos de febrero, pero también pone en riesgo las pretemporadas. Mientras la AFA negocia con los clubes, hoy se vivió un alarmante precedente en el día señalado para comenzar las primeras prácticas: el plantel de Unión de Santa Fe decidió comenzar un paro.
El Tatengue fue uno de los primeros cuatro equipos que hoy debía dar inicio a los trabajos preparatorios. Los futbolistas se reunieron en el predio de Casasol y debatieron hasta alcanzar una determinación: no entrenaron por el atraso en el pago de los haberes correspondientes a noviembre.
Decidieron no hablar con la prensa y en las próximas horas se reunirán con los dirigentes del elenco santafesino para ver de qué manera destrabarán el conflicto. Por lo pronto, la cuenta de Twitter oficial del club no informó sobre lo ocurrido y sólo se limitó a señalar que mañana habrá una práctica por la mañana.
"Esto pinta muy mal, no hay dinero. El reclamo de los jugadores es justo. Sufrimos desfalcos de parte de AFA: nos prometieron pagos pero nos deben millones de pesos", reconoció el presidente del club Luis Spahn a Radio Rivadavia.
En el cronograma de tareas de Primera División, Unión era uno de los primeros cuatro clubes en retomar la actividad, junto con Vélez, Atlético de Tucumán y Huracán, que entrenaron sin problemas.
Mañana será el turno de comenzar la pretemporada para Boca, Newell's, Olimpo, Temperley, Belgrano, Banfield, Atlético de Rafaela y Sarmiento. Varias de estas instituciones también tienen en riesgo las tareas por los problemas económicos.
En este contexto, hoy se llevó a cabo una reunión de urgencia en el Ministerio de Trabajo con representantes legales de los clubes de Primera y autoridades de Agremiados por las deudas con los diferentes planteles. Sin encontrar una resolución, decidieron pactar otra convocatoria para los próximos días.
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