Juanito Cazares convirtió un golazo desde la mitad de campo. Si bien de poco le valió, porque aunque empató el juego su equipo perdió la Copa de Brasil por el resultado en la ida, le alcanzó para recorrer todos los portales del mundo por tamaña conquista.
El ecuatoriano surgido de River y con paso por Banfield, marcó para el Atlético Mineiro en la final de vuelta de la Copa de Brasil disputada ante Gremio. El volante tomó el balón detrás de la mitad de cancha y sorprendió al arquero Marcelo Grohe, quien vio cómo el balón se metió en el ángulo.
Finalmente, Gremio, que contó con las presencia del argentino Walter Kannemann, se consagró campeón gracias al 3-1 que obtuvo en el partido de ida. En Atlético Mineiro también jugó Lucas Pratto.
Por primera vez en 15 años, Gremio logró la Copa de Brasil y se clasificó a la Copa Libertadores. De esta manera, superó por uno al Cruzeiro, convirtiéndose en el más ganador del torneo que reúne a los campeones y subcampeones de los torneos regionales brasileños, además de otros equipos invitados.
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