Aunque lidera su zona en las Eliminatorias europeas, la Selección de Inglaterra sumó un nuevo escándalo en su camino al Mundial de Rusia 2018. Tras la mediática salida del entrenador Sam Allardyce por ser filmado en una cámara oculta que lo puso dentro de una red de corrupción de fichajes, ahora el que quedó salpicado fue Wayne Rooney.
El capitán del equipo tuvo un polémico accionar luego de la victoria por 3 a 0 en el clásico ante Escocia. Una vez finalizado el partido, la mayoría del plantel dejó el hotel donde estaban concentrados para disfrutar del día libre que les dió el DT. Sin embargo, el punta, como no podía jugar contra España por una lesión, decidió quedarse y colarse en una boda que se llevó a cabo en el establecimiento.
"Estaba con miembros de la Federación Inglesa bebiendo vino y cerveza. Su discurso fue arrastrando las palabras, sus labios eran de color rojo como el vino", sostuvo uno de los presentes al diario The Sun sobre Rooney, que está teniendo una conflictiva relación con José Mourinho en el Manchester United.
Pero el rotativo inglés ahora fue más lejos, al revelar detalles de la fiesta y mostrar fotos que comprometen al futbolista. Según este medio, el goleador se tambaleaba por el lugar y le costaba hablar. Además, informan que se marchó alrededor de las 5 de la mañana.
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