El encuentro entre Racing y Patronato por la quinta fecha del campeonato pudo haberse suspendido por un hecho de violencia que se generó en la previa. Dos integrantes de la barrabrava de Racing se trasladaban en una camioneta que portaba banderas, cuando fueron interceptados por varios motociclistas que efectuaron disparos contra ellos.
Los tiros llegaron a las piernas de ambos, por lo que fueron derivados al Hospital Fiorito y permanecen en observación. Según informó Télam, los efectivos afectados al operativo del cotejo que se disputó en el Cilindro de Avellaneda encontraron el vehículo abandonado en Lanús.
El presidente académico, Víctor Blanco, habló sobre este incidente: "Es un hecho grave, si lo hubiese sabido le hubiéramos dado aviso a la Policía".
Además, el dirigente comentó que la balacera se produjo tres horas antes del inicio del cotejo. El lugar de la acción fue en los alrededores del estadio: por las calles Colón y General Paz.
Durante el desarrollo del duelo ante los entrerrianos, los hombres del centro de la popular cantaron "a todos los traidores los vamos a matar". Fue otro capítulo de una historia oscura entre la barra oficial y disidente de la Academia.
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